Para Chung, ésta fue su primera victoria tras tres enfrentamientos con el checo y además, fue la primera vez que le ganó un set. El jugador coreano dotado de una combinación de potencia y precisión y que adquiere una notable confianza en los grandes escenarios, este año está dejando de ser una sorpresa para ser una realidad. Hyeon, a diferencia de los otros jugadores de la nueva generación, ha ido dando los pasos sobre suelo firme, de a poco, sin apuros y su explosión se dio el año pasado cuando fue el campeón inaugural del Master de la Next Gen de la ATP.

Chung este año ya fue el primer surcoreano en alcanzar una semifinal de Grand Slam en el Abierto de Australia. Sus víctimas en Melbourne incluyeron a Alexander Zverev y Novak Djokovic antes de que una ampolla descarrilara su partido de semifinal contra el eventual campeón Roger Federer. Con su victoria de anoche, llega a la cuarta ronda del BNP Paribas Open y su próximo paso es otro jugador experimentado y consolidado dentro del circuito, el uruguayo Pablo Cuevas, un durísimo rival pero nada imposible para el joven coreano, que de ganar podría conseguir una revancha contra Federer, siempre que el campeón defensor derrotara al francés Jeremy Chardy por la misma ronda.

Solidez Oriental

Con un juego basado desde el fondo de la cancha, sólido bien plantado y eligiendo muy bien las pelotas con las que debía atacar, Chung comenzó quebrando rápidamente el servicio del jugador de la República Checa, quien entró frío y errático al partido. Por ello con la eficiencia oriental, Hyeon en su primera oportunidad de quiebre en el cuarto juego, le quebró el servicio al europeo para adelantarse en el partido por 3-1. Tras el quiebre Berdych pareció despertarse comenzó a presionar sobre el fondo de las defensas de Chung y fue así que en el sexto juego igualó las acciones colocándose tres iguales.

El quiebre de Berdych fue el disparador del mejor tenis del coreano quien comenzó a desplazarse desde el fondo de la cancha de una manera estupenda, llegando todas las pelotas y generando en el checo muestras de impaciencia, que lo llevaron a gracias a un terrible golpe de derecha a quedarse nuevamente con el saque de Tomas en el noveno juego y luego cerrar el set en tan solo 41 minutos. La segunda manga se simplifico en un quiebre y luego mantener el saque hasta el final del partido, ese quiebre llegó rápidamente en el tercer juego donde el coreano después de tener un triple punto de quiebre, logró capitalizar el último y quedarse con el saque de Berdych. Después del quiebre el coreano hizo todo bien, administró muy bien sus juegos de saque, no permitió nunca que el europeo le genere puntos de quiebres y así se llevó el partido.

Su rival de cuarta ronda, será Pablo Cuevas, quien está a una victoria de llegar por segunda vez consecutiva a cuartos de final en Indian Wells. El uruguayo lideraba al quinto preclasificado Dominic Thiem por 3-6, 6-4, 4-2 antes de que el austriaco se retirara debido a una lesión en el pie derecho. Por ello será quien enfrente a la promesa coreana. Chung va forjando una realidad, esa realidad va creciendo con sabiduría oriental, el árbol ya generó sus raíces, empezó a levantar el tronco ese tronco hizo crecer las ramas y de a poco van saliendo las hojas, las hojas de un libro que no se sabe hasta que capítulo va a llegar, pero lo va generando en silencio y esa es la diferencia que tienen ante sus futuros rivales de la nueva generación, Hyeon Chung es el más sólido de las figuras del futuro.