Con energía e ilusión altamente renovadas, Feliciano López comenzó de la mejor manera posible su participación en el tercer Grand Slam del año, Wimbledon, el número 70 de esta categoría que disputa de manera consecutiva. En el primer turno de la pista 11, el toledano, que disputa este torneo gracias a la invitación concedida hace apenas dos semanas por parte de la organización, abrió fuego con un cómodo triunfo por la vía rápida (6-4 6-2 y 6-4) ante el estadounidense Marcos Giron, número 155 del mundo y procedente de la fase previa.
El encuentro fue controlado en su totalidad por parte del tenista español, que volvió a dejar claro su permanente idilio con la hierba, dando una exhibición tanto al servicio como en la red.
41 de 43 con primeros saques y un 27 de 31 en la red para Feliciano, que además se mostró muy sólido con sólo 12 errores no forzados
Giron, otrora campeón universitario con UCLA pero muy maltratado por las lesiones (operado dos veces de cadera), se convirtió en el rival idóneo para el estreno del español en el torneo. Con apenas 1,80 metros de estatura y sin ningún puente fuerte destacable en su juego, el norteamericano sufrió mucho con su servicio.
Si en una superficie como ésta no cuentas con un gran servicio, puedes ir olvidándote de la victoria. Obligado a jugar casi cada punto, Giron logró aguantar hasta el 4-3 del primer set. Pero enfrente, Feliciano no daba muestra alguna de nerviosismo. Tenía el partido absolutamente controlado y simplemente era cuestión de tiempo que las oportunidades comenzaran a aparecer.
Y así fue. Con 4-4 en el marcador, el español se fabricó sus dos primeras bolas de 'break', aprovechando la segunda de ellas tras una buena subida a la red con su revés cortado. Tras conseguir el 'break', el servicio de 'Feli' hizo el resto, poniendo el 6-4 con el que se llevaba la primera manga tras 36 minutos.
A partir de ahí, el resto del choque resultó muy cómodo para el español, que seguía rayando la perfección con su servicio y dando buena cuenta de la debilidad del de su rival.
Una salida en tromba, con un contundente 4-0, sirvió a Feliciano para apuntarse también el segundo parcial por 6-2, mientras que en el tercero, Giron volvió a quedarse a las puertas de hacer algo de daño. Nuevamente con empate a cuatro juegos, el estadounidense sintió la presión y regaló su servicio tras estrellar una volea sencilla en la red.
Acto seguido, López cumplió el trámite con su servicio y con el decimoquinto punto directo del encuentro, cerró el mismo en 94 minutos para acceder de forma brillante a la segunda ronda. Allí le esperaría, presumiblemente, el ruso Karen Khachanov, número diez del mundo y que podría marcar las opciones reales del español en esta edición de Wimbledon. Para ello, el moscovita deberá superar al surcoreano Soonwoo Kwon.