Si hace poco comentábamos que en España se prepara la Liga Mapfre a través de la cual volverá el tenis con una gira de torneos nacionales de exhibición en julio, ahora es el turno de Reino Unido, cuya federación se encuentra preparando varios torneos

En total serán cuatro y se jugarán en fechas comprendidas entre el 3 y el 26 de julio teniendo el mayor número de jugadores en un torneo de exhibición hasta la fecha al contar con 32 jugadores, divididos en 16 chicos y 16 chicas entre los que aún no hay ningún confirmado aunque se espera contar con Andy Murray y con la principal raqueta femenina, Johanna Konta (actual número 14 del ránking WTA).

Los partidos se jugarán a puerta cerrada siguiendo las normativas de salud del Reino Unido. "La LTA (siglas de la federación británica de tenis) participa activamente en el desarrollo de las pautas necesarias para los eventos a puerta cerrada, que esperamos sean determinados por el Gobierno en las próximas semanas para garantizar el entorno más seguro para cualquiera que esté involucrado en el regreso a la competición" decía Scott Lloyd director ejecutivo de la LTA.

Los torneos que se disputarán de viernes a domingo en el centro nacional de tenis de Roehampton, incluirán la modalidad de dobles con 8 equipos que se jugarán con sets más rápidos. Además estas competiciones contarán con dotación económica, valorándose el premio en 16.000 libras para los torneos disputados entre desde el tres al cinco y del 17 al 19 de julio, rondando el premio para el campeón las 2.000 libras. El resto tendrán premios de menor valor económico.

Otras competiciones europeas de exhibición

A principios de mayo veíamos en Alemania la primera gira de torneos de exhibición nacionales con solo ocho jugadores y en los que ya se perfilaba cómo sería el futuro del tenis al disputarse sin público en las gradas, sin jueces de silla ni recogepelotas, saltando a la pista solo los jugadores y el juez de silla.

La República Checa organiza esta semana un torneo femenino en Praga pero con unas características diferentes a cómo se disputaron en Alemania, pues las medidas sanitarias del gobierno checo ha permitido público (sin sobrepasar los 300 espectadores, respetando la distancia de seguridad y con mascarillas) e incluso recogepelotas y jueces de línea (portando mascarillas y guantes).