Leyendas Rojinegras: Humberto 'Capi' Medina

El 'Capi' formó parte de aquella gran generación de futbolistas conocida como los niños catedráticos, en la que conquistaron el campeonato de Copa del 1967-1968.

Leyendas Rojinegras: Humberto 'Capi' Medina
(Foto: Club Atlas)
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Por Cristian Poot

Humberto ‘Capi’ Medina nació en Guadalajara, Jalisco en 1942, su carrera como futbolista lo comenzó en las fuerzas inferiores de los rojinegros, fue hasta en los 60’s cuando el ‘Capi’ inició jugando con el primer equipo y lo defendió a muerte, puesto que gracias a sus grandes cualidades como defensa no dejó que su rival pasara en su área.

El ‘Capi’ formó parte de la gran generación de futbolistas conocida como los niños catedráticos, en la que conquistaron el campeonato de Copa del 1967-1968, donde vencieron al Veracruz.

En aquella ocasion, los rojinegros eran dirigidos por el argentino Javier Novello y lograron el título gracias a las anotaciones de Pepe Delgado y José 'Dumbo' Rodríguez, durante ese partido, Humberto Medina realizó buenas actuaciones como defensor,  que con su ubicación dentro la línea defensiva fue capaz de leer el juego del rival y ello lo llevó a levantar el trofeo copero, a partir de ahí, los tapatíos sólo llegaron a una final de Liga en el Verano '99, en la cual fueron derrotados en penaltis por el Toluca.

Además, Humberto Medina no solamente jugó para Atlas, sino que fue parte de las filas del Veracruz en la temporada del 73-74, también formó parte de la Selección Mexicana en donde salió campeón con el tricolor en los Juegos Panamericano del 1967. 

En el año del '68, 'Capi' Medina hizo historia con la Selección Olímpica, en donde el tricolor superó la ronda de grupos venciendo a Colombia y Guinea y perdió ante Francia, pero al final no pudieron conquistar una medalla, a pesar de quedar en el cuarto lugar, en aquel entonces fue una de la mejores posiciones que ha logrado el cuadro mexicano en una justa olímpica.

Así fue el andar de Humberto ‘Capi’ Medina, quien se convirtió en referente de la defensa y será recordado por haber sido parte de los niños catedráticos, su mayor logro para convertirse en leyenda de Atlas es haber conseguido el título en la temporada 1966-67 cuando en el mítico estadio Azteca vencieron a los Tiburones en la final de copa y un año después, también de la mano de los niños catedráticos, quedaron subcampeones en la temporada 1967-68, quedándose a solo un punto del campeón América.