Edson Puch se incorporó a Necaxa en el pasado mercado de fichajes, y rápidamente se convirtió en un consentido de la afición; a base de regates, jugadas de fantasía, esfuerzo, sacrificio, pero sobre todo muchas anotaciones. Y es que en los 16 juegos que ha disputado con la camiseta rojiblanca ha anotado nueve dianas, lo que le da un promedio de 0.56 goles por partido; un ritmo goleador que, en su primera temporada se compara a la de los anotadores extranjeros históricos de los Rayos.
Para poner las estadísticas en contexto, el segundo máximo goleador de los Rayos, Ivo Basay, sumó 15 tantos en los 38 partidos disputados durante su primer año con Necaxa (1990 - 1991), lo que le otorga un promedio de 0.39 goles por juego. Hay que tomar en cuenta que en ésta estadística se contabilizan los 38 cotejos que, en ese entonces, conformaban las temporadas largas.
Por su parte, otro de los estandartes del necaxismo, como lo es Álex Aguinaga, anotó 5 goles en los 32 duelos que disputó en su temporada de debut con los hidrocálidos (1989 - 1990); su promedio goleador se quedó en 0.15, no obstante, en las temporadas siguientes se destaparía para, finalmente, dejar su marca goleadora en 82 anotaciones. Ésta estadística también corresponde a la época de las temporadas largas del futbol mexicano.
Remontándonos a épocas más cercanas, en el Verano del 2001, el argentino Alfredo Moreno se integró a las filas rojiblancas y anotó 6 tantos en 10 encuentros para promediar 0.60 goles por juego, un promedio más que aceptable y que le valió a el Chango para hacerse del cariño de la gente de Aguascalientes en su primer torneo corto con Necaxa.
Repasamos lo hecho por el ecuatoriano Agustín Delgado, quien llegó para el torneo de Verano 1999; en ese certamen convirtió 5 anotaciones en 15 partidos, con un promedio de 0.33 goles por juego y dejó a los Rayos en el 2001 habiendo anotado 40 dianas en encuentros oficiales con los Rayos.
Finalmente, en nuestra lista de goleadores necaxistas extranjeros, el argentino, Sergio Zárate, surgido de Vélez Sarfield, llegó al club en la temporada 1995-1996 y marcó 12 tantos en 32 duelos; una temporada larga en la que promedió 0.37 tantos por juego. Al marcharse en 1999 dejó su récord en 39 goles.
Por ahora, el Mago mantiene un paso goleador que es equiparable al de grandes goleadores electricistas, su primer certamen corto ha sido impresionante; no obstante, sólo el tiempo y el propio Puch dirán si puede escribir su nombre con letras doradas dentro de la historia del Club Necaxa.