Ansioso por su regreso a las canchas, José Iván Rodríguez ha tomado con buena cara el hecho de haber sido operado y estar alejado de las canchas, y es que no se arrepiente de haber jugado infiltrado los últimos tres encuentros del torneo pasado dado un esguince de tobillo que se le presentó. Fue el riesgo que quiso tomar y, al ser su primera final en primera división, lo asume.

“Son mis primeras finales y no me arrepiento de nada, lo hice consiente al 100%, el hubiera no existe así que no pasa nada. Fue muy complicado no poder hacer la pretemporada junto con los demás, pero gracias a Dios la operación salió bien, lo importante es estar bien y llegar así al torneo”, declaró este martes a su llegada a la ciudad luego de la primera semana de trabajo en Querétaro con el equipo.

No obstante, si una oportunidad se le fue de las manos al ‘Jefecito’ por su lesión, fue precisamente disputar la Copa Oro con la Selección Mexicana, sabiéndose incluso prácticamente seguro en el listado final de Gerardo ‘el Tata’ Martino. Ante eso, la frustración no ha aparecido en él, pues la petición del mismo entrenador nacional fue que “estuviera bien emocionalmente porque eso es algo que uno no quiere”.

Sin tener un pronóstico concreto para su reaparición, finalmente Rodríguez hizo un llamado a los jóvenes, como Carlos Guerrero, que ante las lesiones de él y de Pedro Aquino, buscarán levantar la mano para hacerse de un puesto titular en el once de Ignacio Ambriz de cara al torneo entrante.

“La oportunidad la tienen es cosa de que la sepan aprovechar y que sigan trabajando como lo han venido haciendo”, concluyó.