La Selección Nacional de México recibió en la cancha del Estadio Azteca a su similar de Estados Unidos en un partido de suma importancia para la Eliminatoria Mundialista de Concacaf.

La presión caía sobre el Tricolor debido a las pobres actuaciones mostradas durante este octagonal final, las cuales les han costado algunos abucheos en el Coloso de Santa Úrsula.

Además, la Selección Azteca venía de dos derrotas consecutivas ante el equipo de las Barras y las Estrellas por lo que este encuentro se presentaba como la ocasión perfecta para terminar con la mala racha.

Como es costumbre en cada enfrentamiento entre estas selecciones, el ambiente dentro y fuera de estadio fue inmejorable. La pasión y algarabía permeó desde la previa del partido, donde varias muestras de folklore tanto de locales como visitantes condimentaron la espera del silbatazo inicial. La porra visitante que viajó en gran número se hacía notar bajo el grito de “U.S A, U.S.A”; mientras del lado de los mexicanos, un grupo de mariachis entonaba “México lindo y querido” a las afueras del estadio.

El color no se hizo esperar y fue el grupo de animación “Mi loka pasión” que al puro estilo de barra argentina con trapos, cánticos y bombas de colores inició un recorrido de la explanada principal hasta la puerta tres del recinto. Sin embargo, debido a la reciente prohibición de barras en el fútbol mexicano, la porra no pudo entrar en bloque.

Aunado a estas medidas para erradicar la violencia dentro del fútbol también se estrenó el Fan ID aplicado de forma masiva, pues dada la sanción de juegos a puerta cerrada para el Tri, este método solo se había probado en piloto con un grupo reducido de asistentes. En este primer intento, la organización quedó un poco corta, orillando a que aún en el minuto 25’ del primer tiempo se apreciaran grandes filas para el registro del acceso.

El Fan ID surgió como estrategia para erradicar algunos actos de violencia dentro del fútbol como el grito homofóbico y la violencia entre porras. Ante este requisito, Carlos Galicia, aficionado originario de Tijuana que viajó a la CDMX exclusivamente para presenciar este partido, compartió para VAVEL México su pensar respecto a estas medidas y los actos violentos dentro del fútbol : “El Fan ID es rápido y fácil de utilizar, al menos en mi caso así lo fue, no demoró más de 5 minutos hacer el registro. Quizá la organización para el acceso podría ser más ágil”, sugirió.

 Carlos Galicia, aficionado del Tricolor. Foto: VAVEL
Carlos Galicia, aficionado del Tricolor. Foto: VAVEL

También agregó que, si bien esta herramienta ayudará a identificar a los aficionados que incumplen las reglas, también es una tarea personal el entender y trabajar por eliminar esas conductas ajenas al fútbol.

Carlos, se mostró inconforme con el grupo de aficionados que se movilizaron en redes para continuar con el grito homofóbico y expuso cómo ese grupo minoritario termina por afectar a los verdaderos aficionados:

“Es injusto porque por un grupo terminamos por pagar todos, y se refleja en el alza de precios del boletaje o a que no haya púbico… los mexicanos somos fieles a nuestra selección y continuaremos apoyando”, añadió Galicia.

A juzgar por este aficionado muchos más compartirán este pensar, sin importar que tengan que cruzar el país para alentar a México en su camino a Catar.

Una vez iniciado el partido, cerca de 50 mil espectadores cantaron durante los 90 minutos el famoso “Cielito lindo” en la tribuna mientras esperaban los goles que nunca llegaron. Lo que sí llegó fue la expulsión de algunos aficionados que incurrieron en el grito homofóbico, y aunque aún no hay reporte oficial fueron varios los aficionados ya identificados por esta situación.

Finalmente la afición se mostró descontenta una vez más por el actuar de Gerardo Martino y sus dirigidos que repartieron unidades con su acérrimo rival y tendrán que esperar los siguientes encuentros para poner el punto final en su búsqueda por el boleto mundialista.

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