Los 21 puntos de diferencia que extrajo Charlotte Hornets, durante la jornada basquetbolera que se disputó anoche, fueron suficientes para quebrar en un sentido táctico y psicológico a Orlando Magic. Si se tienen en cuenta los distintos pasajes del partido, el talentoso, dinámico e intéprido base, como lo es Kemba Walker, en asociación con Nicolás Batum (uno de los jugadores destacados de la selección de Francia) demostraron ser las credenciales de un equipo que siempre apostó al contrataque.

Walker anotó 15 unidades, quien estuvo muy bien secundado por Batum que obtuvo 16 puntos, al igual que Michael Kidd-Gilchrist. La goleada que le propinó Charlotte Hornets a Orlando Magic significó la tercera victoria consecutiva para la franquicia que se busca acomodar a esta dura temporada de la NBA.

En lo que respecta a los porcentajes del encuentro, Charlotte tuvo una efectividad del 48%, mientras que Orlando Magic consiguieron un nada despreciable 37,4%.

En el rubro de los rebotes, Charlotte obtuvo 67. En cambio, los Magic concretaron 42 rebotes.

La diferencia notoria, y diría que por allí pasó la clave del juego, fue la diferencia en el porcentaje de triples: 40% para el ganador y un 26,5% para el equipo visitante.

Esta victoria no hace más que entender que los Charlotte Hornets tienen mucho para dar en la actual temporada de la NBA. Se sabe que la temporada es larga y duradera, por eso serà importante preservar la integridad física de los jugadores. A diferencia de FIBA, la liga más importante del mundo tiene casi cuatro juegos por semana. Ese será el desafío para los Hornets.