Cuando todas eran buenas noticias para River, surgió un problema que se tiene que solucionar lo más pronto posible. El Millonario cuenta con seis extranjeros en sus filas cuando el cupo sólo permite cuatro, es por eso que deberá liberar a dos de ellos.

A los recientes refuerzos de los colombianos Teo Gutiérrez y Carlos Carbonero, sumadas a la de su compatriota Eder Balanta, se acoplan Carlos Sánchez, Adalberto Román y Juan Cazares. 

Si bien el ecuatoriano se encuentra en Banfield, el pase sigue perteneciendo a River y es por eso que ocupa el lugar de extranjero. Los dirigentes del club están tratando de vender el 80 por ciento del pase a Independiente del Valle de Ecuador, pero hasta aquí aún no hubo acuerdo con las autoridades del club de Sangolquí. 

Los otros dos jugadores apuntados a vender son Sánchez y Román. El uruguayo está cerca de contretar su paso a Vélez Sarsfield y el paraguayo tiene una oferta del club Peñarol aunque su prioridad es quedarse bajo las órdenes de Ramón Díaz. "Mi intención es quedarme. River es mi presente y mi realidad", afirmó el central. Aunque tambíen entendió la situación que vive la institución: "Si estoy ocupando el cupo y River lo necesita, uno tratará de llegar a un acuerdo. Dependo de lo que diga el club", sentenció el paraguayo.

En el día de hoy se supo el interés por Rodrigo Mora, el uruguayo que abandonó el club al finalizar el pasado semestre. Si llegará a concretarse este pase, el club sumará a un nuevo extranjero más. 

Desde la dirigencia riverplatense deberán actuar con rapidez porque el viernes finaliza el plazo para inscribir a los jugadores.