Fue el año pasado cuando a fines de noviembre, Miguel Ángel Russo renunció a la dirección técnica de Rosario Central; A partir de allí, la nueva dirigencia se encargó de buscar un entrenador de renombre que sepa de pelear cosas importantes, pero poco a poco fueron siendo descartandos técnicos como Antonio Pizzi, Luis Zubeldía, los mellizos Barros Schelloto, etc.

Al final surgió un nombre de mucha espalda y con poco renombre como Eduardo Germán Coudet, que finalmente convenció a la comisión directiva; Desde ese momento, el Chacho firmaba el primer contrato de técnico en su amado Central, siendo esta su primera experiencia al mando de un plantel profesional.

Ya empezando el 2015 vendrian los refuerzos que​ el flamante Dt tendría en mente para la conformación de un nuevo equipo, por eso tuvo mucha importancia los contactos del entrenador en el mundo del fútbol como la insistencia para traer jugadores de jerarquía. Así fue como Marco Ruben, Cristian Villagra, Pablo Álvarez, José Luis Fernández, Gustavo Colman y César Delgado fueron convencidos para vestir la camiseta auriazul.

Luego de una intensa pretemporada, el plantel debutó de la mejor manera el torneo Julio H. Grondona con una victoria los primeros cinco partidos de forma consecutiva, destacando en la formación títular a los refuerzos Cristian Villagra, Pablo Alvarez, Fernández y Ruben como único punta, con la continuidad de Caranta bajo los tres palos y Nery Domínguez en el círculo central junto a Damián Musto, apostando ademas  a la aparición de Franco Cervi como enganche o volante zurdo. En esta etapa se destacó el talento de "Chuky" el buen juego en equipo, la presión al rival para recuperar la pelota y el ingreso de Gustavo Colman al mediocampo, este último cambio hizo ganar muchos partidos en la primera etapa por la calidad en las asistencias del "comandante".

Las siguientes fechas  se caracterizó por lesiones o ausencias y cambios de esquemas acompañado de no tantos buenos resultados y una seguidilla importante de empates en condicion de local. Por ejemplo, la ausencia de Pablo Álvarez por problemas personales, el ingreso del "Chelito" al equipo títular, asi el plantel terminaba la mitad de año espectante en la tabla de posiciones pero un tanto preocupado por el juego.

Entonces fue ahi cuando el Chacho puso el ojo en otros jugadores  como Javier Pinola y Marcelo Larrrondo, el conocimiento del Dt para encontrar a estos futbolistas que no eran tan conocidos para el hincha pero que fueron muy importantes para la segunda mitad del año. Los dos jerarquizaron mucho el plantel y por ejemplo Larrondo acompañó a Ruben para darle oxígeno al único punta Auriazul. Lo más importante en ese  momento fue haber ganado el tan importante clásico que siempe es un inflador anímico para el equipo.

El partido que el canaya recibe a Belgrano fue otro punto de inflexión, por que  el entrenador se decide a romper el doble cinco para tener mas juego fluido y le da la títularidad a Walter Montoya mutando al famoso esquema con el cual terminaría el año, el 4-1-3-2.

En conclusión, lo más importante de este renovado Chacho  versión entrenador, fue constancia y conocimiento para el armado del equipo, y como una virtud el haber cambiado de nombres y esquemas en pos de un mejor rendimiento, porque no es fácil cambiar una idea de juego o reemplazar nombres que parecían ya consolidados; Otra cosa para destacar es el trabajo del cuerpo técnico en conjunto con el plantel, además Coudet es un gran inflador anímico que conoce a la perfección al club.

Por todo esto no es difícil imaginarse a otro Central protagonista, esta vez afrontando la triple competencia.