La cara lo dice todo: Central compró a Marco Ruben

Después de mucho tire y afloje entre la dirigencia Canaya y la del Dinamo de Kiev, los ucranianos aceptaron la oferta del club rosarino. "La alegría es mía, de mi gente y de la gente de Central", declaró hace instantes en conferencia de prensa.

La cara lo dice todo: Central compró a Marco Ruben
Ruben firmó por tres años. (Foto: Sitio Oficial)
francovidalok
Por Franco Vidal

Ruben sigue en Central y no es un sueño. Es realidad. Ayer por la noche llegó desde Ucrania la autorización para que el delantero entrene hoy con sus compañeros. Ya había aroma de acuerdo entre los clubes pero nada estaba definido.

#RubenEsCanalla es el hashtag que usaron los hinchas para hacer viral el pedido. Otros, cómicamente, le pedían al país europeo que libere al preso político Marco Ruben. La mayor parte de responsabilidad de que esta transferencia se lleve a cabo la tiene el propio jugador, que siempre dejó en claro que quería seguir en Central. "Me puse firme y al Dínamo no le quedó otra que aceptar", sostuvo el mejor futbolista del país en el 2015.

"Yo no tenía otro objetivo que jugar en Central, era lo que quería de mi vida, es mi felicidad" agregó a las declaraciones de este mediodía. Miranda, su representante, siempre estuvo unido a él en su deseo y en la semana  dijo que "Marco rechazó ofertas multimillonarias porque el deseo de él es seguir en Central". Además sostuvo que el Dínamo intentó convencer al jugador de irse a otro club pero que cuando Ruben decide no hay vuelta atrás.

La compra de Marco Ruben queda en la historia de la institución rosarina junto a la de Mario Kempes porque fueron las dos que más dinero se invirtió. Además de quedar al nivel del Matador, al goleador Canaya de hoy se lo compara con Aldo Pedro Poy por el amor que demostró por su club.

En el año 1969 cuando a Poy vinieron a buscarlo los dirigentes de Los Andes a pedido del DT, un tal Ángel Tulio Zof, Aldo se fue a esconder a la casa de un amigo en una Isla frente a Rosario para que no lo encuentren. Finalmente a Poy no pudieron encontrarlo, por ende, siguió en el club de sus amores. Años después y en épocas muy distintas, un delantero de 29 años dijo "Me retiro del fútbol si no sigo en Central", y ese fue Marco Ruben. Otro que consiguió seguir defendiendo los colores de su corazón.