El 16 de diciembre de 1993 se inauguró el nuevo estadio de San Lorenzo de Almagro llamado Pedro Bidegain, conocido más popularmente como el Nuevo Gasómetro.

Se jugaron varios clásicos contra Huracán en dicha cancha y se dieron tres de las máximas goleadas en la historia de este enfrentamiento. La particularidad es que todas fueron en favor del Ciclón. El Globo sólo ganó dos veces en el Nuevo Gasómetro, ambas por 1-0.

La primera de esas goleadas fue, hasta hoy, la de mayor diferencia en la historia del clásico y se dio en la fecha 6 del Apertura de 1995, el torneo posterior al Clausura que habían ganados los cuervos. El resultado fue 5-0, con goles de Claudio Biaggio, Paulo Silas, Roberto Monserrat y dos de Esteban González (uno fue un golazo). En la visita habían visto la roja Hugo Váttimos, Claudio Marini y Walter Pelletti.

Otra se dio un par de años después y con un resultado parecido. Fue en la segunda fecha del Clausura de 1997 y el Ciclón, dirigido por Jorge Castelli, ganó por 5-1. Los tantos fueron de Néstor Gorosito, de penal, Sebastián Abreú, con un golazo todavía recordado en el que se la picó a Marcos Gutiérrez, Silas, Luis Fernando y Claudio Rivadero. Había descontado Antonio Barijho y fue el primer gol del Globo en el Nuevo Gasómetro.

Y el último resultado abultado sucedió en la fecha 16 del Clausura de 2003 pero esta vez fue por 4-0. José Chatruc, Alberto Acosta (en dos ocasiones) y Damián Luna marcaron los goles del equipo que había ganado la Copa Sudamericana y era dirigido por Rubén Darío Insúa. En el equipo visitante, habían expulsado a Alejandro Alonso. Ese día se celebraba el Día del Padre y, encima, Huracán llegaba descendido. Otra curiosidad fue que en el campeonato anterior a éste el Ciclón también había ganado por el mismo marcador pero en Parque Patricios.