La derrota por 2-0 ante Boca Juniors en el amistoso jugado ayer en La Plata preocupa en San Lorenzo de Almagro porque, más allá del resultado, se jugó mal. Diego Aguirre, entrenador del Ciclón, fue uno de los que se mostró consternado tras el partido y, en conferencia de prensa, declaró: "Es una alarma para corregir errores futuros. Me voy mal porque no me gusta perder, por más que haya sido un amistoso". Y agregó: "Arrancamos bien el clásico hasta el gol de ellos. Después, nos desordenamos".

Además, Aguirre creyó que el amistoso se dividió en dos partes distintas y así lo explicó: "En el primer tiempo creamos situaciones y ellos no nos superaron. Pero en el segundo ya no fuimos los mismos porque nos desordenamos, perdimos la pelota y, a partir de ahí, Boca creció". Y también hizo hincapié en que se había notado que los dirigidos por Guillermo Barros Schelotto tenían más días de trabajo y más ritmo, y que ellos estaban en "la etapa de probar y buscar la mejor forma".

Quien opinó igual que su entrenador en cuanto al tiempo de trabajo de ambos equipos fue quien salió lesionado ayer, Néstor Ortigoza: "Boca llegó con más ritmo porque jugó la Copa Libertadores y se notó".

En cuanto a su lesión, que el primer diagnóstico dijo que sería un esguince de ligamento colateral medial de la pierna izquierda, el volante paraguayo expresó: "Me parece que me pierdo el primer partido contra Banfield de la Copa Sudamericana, el 23 de agosto". Y avisó: "El martes me hago los estudios, pero si es un esguince de rodilla, serán entre 15 ó 20 días. Son cosas que pasan, a veces tenés rachas".