Llegando a fines de la década del 60, en el Torneo Nacional de 1968 fue allí donde Vélez vivió en primera persona el sentimiento de salir campeones.
Este campeonato había sido incierto hasta la última donde Vélez, River y Racing tenían acumulados 22 puntos pero fue la diferencia de goles lo que le permitió al equipo bajo la conducción técnica de Manuel Giúdice, obtener su primer campeonato.
La era Bianchi
Pero ninguna situación similar volvió a ocurrir hasta en 1993 donde Carlos Bianchi decide ponerse en lugar de entrenador al club de sus raíces.
Con nuevo director técnico comenzó el camino hacia la gloria
El 20 de febrero de ese año inició la primera fecha, en esta oportunidad, Vélez venció como visitante por 2 a 0 ante Deportivo Español. Luego consigue su segunda victoria con San Martín (T) en el José Amalfitani.
Ya en la fecha 3, empata por primera vez contra Belgrano. Posterior a esto vuelve a sumar de a tres contra Boca por 1 a 0. Lo mismo sucede con Huracán en Liniers pero en esta ocasión por 3 a 0 y empata contra Ferro 0 a 0.
Hasta este momento, Vélez se mostraba como un equipo con fuerza, que estaba pisando fuerte en el torneo y que estaba bien dirigido por un jugador que conocía el club y traía ideas de afuera. Pero contra River no pudo y obtiene su primera derrota por un 2 a 1 como local.
Sin embargo, un tropezón no es caída. El ''Fortín'' siguió con su ola ganadora con Newell's Old Boys (1-0) , Gimnasia (LP) (1-0), Racing (3-0) y Platense (2-1).
Recién en la fecha 12, empata nuevamente pero con Deportivo Mandiyú con un 0 a 0.
Contra Talleres de Córdoba fue su máxima goleada en el torneo por 4 a 0
Luego, empato contra Lanús (1-1), San Lorenzo (0-0) pero remota la victoria contra Argentinos Juniors con un 1 a 0.
Ya solo faltaban 3 fechas para cerrar el campeonato pero estaba muy peleado el primer puesto.
En la número 17, cae ante Rosario Central por 2 a 0, una derrota que lo complicaba al Fortín pero no lo alarmaba.
La gran fecha 18
Llegó la fecha 18, donde acá se podía dar la gran oportunidad de volver a dar una vuelta olímpica.
En esta oportunidad, el rival era un Estudiantes que no estaba en la pelea por el torneo pero quería seguir sumando.
Para este encuentro decisivo, Bianchi paró un once ideal: Chilavert; Almandoz, Trotta, Sotomayor y Cardozo; Basualdo, Gómez, Bassedas y Pico; Flores y Asad.
El plantel lo completaban Armentano, Bidevich, Camps, Compagnucci, Docabo, Galeano, Claudio Husaín, Pellegrino, Posse, el Gallego González, Leonardo Ramos, Fabián Vázquez y Sergio Zárate.
Los Fortineros recordamos este hermoso empate 1 a 1 gracias a los goles de Claudio París (Estudiantes) y José Luis Félix Chilavert (Vélez) que les devolvió aquella alegría que no se vivía desde el 68.
En la última fecha, empata 0 a 0 con Independiente pero eso no pudo borrar las tapas de todos los diarios y revistas que titulaban ''Vélez campeón''.
Final de la era Bianchi
No se podía negar que Bianchi había logrado un gran trabajo y un óptimo rendimiento de sus muchachos pero eso no termino ahí.
Luego de consagrarse como campeones después de 25 años, Bianchi como entrenador obtuvo tres torneos locales, y tres internacionales: Clausura 1993, Copa Libertadores 1994, Copa Intercontinental 1994, Apertura 1995, Copa Interamericana 1996 y Clausura 1996.
En 1996 tuvo su despedida en el José Amalfitani, colmado por 50.000 personas para partir a la AS Roma de la Serie A italiana.
