Si hay que hablar de un referente, de un ídolo, con más de 300 partidos en River, de un jugador que supo aguantar los peores momentos de la historia y hasta que se bancó ser suplente sin generar malestar en el grupo, ese es Leonardo Ponzio. Si bien no nació en River, en el Millonario es donde se siente como en su hogar. Desde 2012 que está ininterrupidamente en el plantel riverplatense y actualmente es el capitán vigente del campeón de América, título que ya ganó dos veces en Núñez. Con La Banda, lleva nada menos que 12 títulos conquistados y, fiel a su estilo, va por más.

El equipo de Marcelo Gallardo empezará con la pretemporada mañana, en el River Camp, antes de emprender su viaje fugaz a Punta del Este. Antes de emprender el regreso al trabajo, Ponzio dialogó con el programa televisivo Estudio Fútbol y se refirió a su continuidad, con 36 años y el desgaste que se va acumulando: "Me queda poco, pero hoy la cabeza me da para seguir a este ritmo. Me mueve mucho entrenar y competir. Hoy todavía siento eso. Y también me mueve el grupo que tenemos, que es bárbaro". Y agregó: "Me gustaría seguir ligado al fútbol post retiro". Recordemos que el capitán tiene contrato hasta junio de este año y aún no acordó la renovación del mismo.

Asimismo, Leo valoró la unión del grupo con el fin de seguir aumentando el palmarés glorioso de la institución: "Soy lo que soy por el grupo que tenemos hoy y que tuvimos años anteriores. Eso hace que cada pretemporada que comienza me mueva a salir a competir y pelearle un puesto a un pibe veinteañero". En este verano, Bruno Zuculini y el juvenil Santiago Sosa intentarán competir con él por ser el 5 de River.

Por otra parte, elogió al Muñeco Gallardo, quien le devolvió la confianza: "Hay técnicos que te dejan enseñanzas. Marcelo me corrigió muchas cosas y es que más me marcó por todo lo vivido. Entendí que hay que ordenarse y perderla menos. También entendí el cambio en la final (salió en el complemento para que ingrese Juan Quintero, determinante en el resultado)".

Por último, se refirió al lamentable episodio previo a la final frustrada en el Monumental: "En el fútbol falta solidaridad; hay mucho egoísmo. En River siempre quisimos jugar la final contra Boca". Y señaló, eufórico por el logro obtenido el pasado 9 de diciembre en Madrid: "Quedamos en la historia, pero mañana tendrá más fuerza".