Unión chocó contra un rival duro, concentrado y ordenado que le impidió desarrollar su juego. Central Córdoba le tendió una red sobre sus jugadores más lúcidos y lo complicó varias veces en su área, al punto de haber convertido a Sebastián Moyano en la figura.

Fue un encuentro parejo y el empate pareció ajustarse al trámite, a pesar de que la visita tuvo las ocasiones más claras. Central Córdoba se plantó con un 4-4-2 y lo esperó, mientras que el Tatengue no tuvo un generador de juego: Marcelo Cabrera no logró manejar la pelota  con criterio, Gabriel Carabajal estuvo desaparecido, y Franco Troyansky y Nicolás Mazzola quedaron atrapados por la marca.

De hecho, fue Central Córdoba el que finalizó la primera parte dejando una mejor imagen. En la última del primer tiempo, contó con un remate desde el centro del área de Gervasio Núñez que se perdió por la izquierda. El local tuvo un disparo de Federico Milo que se le fue demasiado alto tras un saque de esquina. Es así que se fueron al descanso dejando la sensación de que el empate estaba bien.

En la segunda parte del complemento, nada cambió. Leonardo Madelón no realizó ningún retoque, y a Unión le siguió costando armar juego y generar peligro. A los 12 minutos, Jonathan Bottinelli bloqueó un tiro de Franco Cristaldo desde el lado derecho del interior del área. A los 15’, ingresaron Sebastián Assis y Martín Cañete por Javier Méndez y Mazzola, respectivamente, y el equipo empezó a jugar más profundo.

Después de otro remate errado por parte de Cristian Vega, a los 35 minutos Unión creó una buena jugada colectiva: Cañete retrocede para Carabajal, éste la abre para Cabrera que da una media vuelta cediéndola para Assis y el volante central intentó un disparo de larga distancia que fue bloqueado. Y seis minutos más tarde, Cañete abrió para Brian Álvarez, éste mandó un centro para Troyansky y el Pocho erró el cabezazo.

Pero el ímpetu llegó hasta ahí. El conjunto de Madelón no tuvo ideas, y el cambio de Álvarez por Emanuel Cecchini no modificó nada en los minutos finales. Ya sobre el final llegó a los ponchazos. A los 44’ Cañete manda un pase atrás para la llegada de Álvarez que con un tiro no pudo vencer al arquero Diego Rodríguez. El pitazo final de Pablo Echavarría apagó el partido.

Central Córdoba hizo su negocio y se llevó un punto que le permite, hasta el momento, seguir fuera de la zona de descenso. Este fue su octavo encuentro sin anotar. Por el lado de Unión, fue el octavo duelo sin goles a favor y el sexto que no gana en condición de local.

Esta vez, lo futbolístico quedó en el haber. Una licencia que puede darse por todo lo bueno que había hecho hasta acá. Lo matemático aún lo sigue acompañando. Motivos suficientes para evitar preocupaciones desmedidas y seguir apostando a un plantel que parece tener mucho más para dar.