Por la cuarta fecha de la Conmebol Libertadores, Boca Juniors se llevó un triunfo importantísimo tras vencer por la mínima diferencia a Independiente Medellín, que sigue sin sumar unidades hasta el momento. A minutos del final, apareció Eduardo Salvio para romper el marcador y acompañar su gran momento futbolístico.

La primera parte del encuentro mostró a un Boca más protagonista pero sin causar tanto daño. El club de la Ribera contó con mayor posesión durante los primeros 45 minutos, pero fueron pocas las situaciones concretas de gol. Una de las primeras fue un remate de Carlos Tevez y quizás la que llevó más peligro al arco rival.

Con el correr de los minutos, DIM tuvo sus aproximaciones e intentó lastimar por las bandas aunque sin obtener resultado alguno. Llegando a los 17’, el “Apache” tuvo otra chance de romper el marcador pero falló en el mano a mano y seguido a esto, Eduardo Salvio aprovechó el rebote pero las manos de Andrés Mosquera y el travesaño evitaron la primera anotación azul y oro.

Boca intentó generar peligro por medio de la tenencia del balón, pero las imprecisiones en la zona ofensiva no dejaban conforme a un equipo que había contado con una gran actuación ante Libertad. Por su parte, el local acumuló varios errores e intentó cortar el juego con una seguidilla de faltas.

Llegando a los 33’, Gonzalo Maroni tuvo que salir de la cancha por una lesión y le dejó el lugar a Agustín Obando, para continuar con la velocidad por el sector izquierdo y tener un poco más de dinámica. El marcador no pudo romperse en el primer tiempo y los dos equipos se iban a los vestuarios sin marcar goles.

En el complemento, el club de la Ribera pateó el tablero y Leandro Somoza apostó por otra modificación: Walter Bou por Franco Soldano. La falta de ritmo de competencia fue clara en un tramo del encuentro donde no se observaron muchas llegadas concretas y el cansancio se hacía notar por momentos.

A partir de los 20’, el partido empezó a “romperse” y los dos equipos se animaron a atacar más con la clara misión de anotar un gol que podía definir el cotejo. Un tiro de libre de Javier Reina llevaba un poco de peligro a la portería defendida por Esteban Andrada, y rápidamente, Boca comenzó a responder con otras situaciones.

El ayudante de campo, esta vez en rol de DT, mandó a la cancha a Nicolás Capaldo en lugar del amonestado Jorman Campuzano y luego Boca asustó a DIM con tres posibilidades claras, una de las más claras fue un remate de Carlos Tevez, quien se ubicaba cerca del punto penal y envió la pelota a metros del arco.

A falta de quince minutos para el cierre, Juan Cuesta tuvo en sus pies la oportunidad de poner en ventaja a su equipo, pero su tiro cruzado se fue muy cerca, siendo la jugada más peligrosa en el equipo comandado por Aldo Bobadilla. Las modificaciones en la visita continuaron y Edwin Cardona reemplazó a Tevez, de gran partido.

Todo parecía que el 0-0 era irrompible e iba a producirse un reparto de puntos, pero a los 87’, el Xeneize aprovechó una mala salida de la defensa cafetera y Capaldo, falló en su definición. El que no malogró su remate fue Eduardo Salvio, quien aprovechó el rebote y selló el 1-0 a favor del club de la Ribera, que obtiene un gran resultado, continúa invicto en su grupo y se encuentra a un paso de la clasificación a los octavos de final. Triunfo luchado para un Boca que sigue sumando de a tres.