Alexandre Guimarães

Alexandre Guimarães

Football Coach
Alexandre Guimarães

1959 Maceió, Alagoas


Alexandre Borges Guimarães (7 de noviembre de 1959) nació en Alagoas, Brasil. En su juventud se mudó con su familia a Costa Rica y allí adquirió la nacionalidad costarricense y dio sus primeros pasos como futbolista. ‘Guima’ como es conocido mayormente en el albor del futbol, tiene el don de la adaptabilidad idónea a donde llega. En su vitrina no cuenta con un amplio palmarés deportivo, sin embargo, está llena de elogios y un aprecio por los que han compartido cancha y los que han estado al mando de Alexandre Borges Guimarães.

La pelota lejos de casa

Alexandre Guimarães inició su carrera rápidamente como jugador profesional en el Municipal Puntarenas (Costa Rica), equipo en el cual jugó no más que un año para luego dar el salto al mejor momento de su carrera con el Saprissa (Costa Rica), en el que permaneció 11 temporadas (1982-1992). Al adquirir la nacionalidad, fue llamado para hacer parte de la Selección de Costa Rica y participar en el Mundial de Italia 1990, en el que su cuota participativa fue el pase para el histórico gol de Hernán Medford en los últimos minutos para el triunfo sobre Suecia 1-2. Finalmente selló su trayectoria como futbolista en el Municipal Turrialba en el que estuvo una temporada (1992-1993).

Importantes resultados como entrenador

Al poco tiempo de su retiro de las canchas se vinculó al banquillo de A.D. Belén con el que ganó el Torneo de Copa en Costa Rica en 1996. Siguió su paso por el Club Sport Herediano, el Deportivo Saprissa en cual dirigió en tres ocasiones distintas por una temporada (1997-1999; 1999-2000; 2011-2012), Club Sport Cartaginés, Comunicaciones de Guatemala, Irapuato en el que salvó la temporada y evitó su descenso de la primera división del futbol mexicano. También en Dorados de Sinaloa de México y Al Wasl FC de Emiratos Árabes Unidos en el que se consagró campeón de la Copa de Clubes Campeones del Golfo 2010 y recientemente al América de Cali al que le dio el primer título después del ascenso a la primera división colombiana.

De Selecciones y otros tragos amargos

‘Guima’ aceptó el reto de dirigir a la Selección costarricense. Durante su paso al mando de los ticos se clasificó a dos Mundiales, en los que no pudo avanzar de la primera ronda. El de Corea y Japón 2002 al que clasificó primero de la CONCACAF. En la cita mundialista debutó con una victoria frente a China, un empate con Turquía y una derrota abultada con Brasil que, por diferencia de gol e igualdad de puntos con Turquía, no le permitió avanzar a Octavos de final en aquella ocasión. Posteriormente disputó en Alemania 2006 con tres derrotas al hilo en el Grupo A y recibió 9 goles mientras que pudo anotar 3 en tal presentación mundialista.

Con la Selección de Costa Rica llegó a cuartos de final en la Copa América de Colombia 2001 y la llevó a la final en la Copa de Oro en el año 2001. Posteriormente fue llamado a ser el director técnico de la Selección de Panamá de la que luego fue despedido, puesto que nunca encarriló su camino a Sudáfrica 2010.

Futbol sudamericano, primer contacto

Luego de dirigir en el Mumbay City FC de la India, llegó sin precedente alguno al futbol colombiano para ponerse al mando del América de Cali en el 2019. La primera vez con un equipo sudamericano, con un futbol totalmente diferente al que ya estaba acostumbrado, logró salir campeón con los escarlatas. Tras ascender, después de cinco años en la segunda división del futbol colombiano, Alexandre Guimarães se convertía en el primer extranjero que le daba una estrella al América de Cali desde el banquillo.

Su paso por el futbol sudamericano y propiamente colombiano aún no ha finalizado. El 30 de noviembre fue oficializado como director técnico de Atlético Nacional en el que debutará en el año 2021 participando naturalmente en la Copa BetPlay, Liga BetPlay y la segunda fase de la Copa CONMEBOL Libertadores.

Conyugue y vida familiar

Su familia la integran Lina, su esposa, y sus dos hijos adolescentes, Mauro y Celso.

Biografía elaborada por: Juan Pablo Ángel.