La victoria del equipo cardenal tuvo algo especial, conmemorarle a la ciudad de Bogotá sus “476 agostos” y además retornar a la victoria luego del empate en Tunja. En el Campín, estadio que desde hace 76 años es su casa, el onceno de Gustavo Costas consiguió su segundo triunfo y con siete puntos es parcialmente tercero a falta de un partido.

Independiente Medellín, por su parte, no pudo ganar los puntos que perdió en condición de local con el Once Caldas; a semejanza del partido anterior, el elenco de Hernán Torres descuidó un tiempo y se vio obligado a remar desde atrás y a pesar de casi conseguirlo, el equipo rojo aún demuestra errores en salida y toque que no se pueden remontar con la personalidad y el esfuerzo que, casualmente, lo demuestra solo en el último tercio de los partidos.

El resumen del encuentro se puede mirar a la luz del primer tiempo, allí se ven las causas y consecuencias de un equipo que descuido su estructura y otro que aprovechó tales falencias. La presión alta, por ejemplo, en el medio campo, fue la carta que utilizó Costas para vencer en menos de diez minutos al DIM, obligándolo a equivocaciones y pérdidas del balón en campo propio.

El rojo de Antioquia, quien también esperaba conmemorar su propia fiesta, la Feria de las Flores en su ciudad, se vio deslucido en la primera mitad y sin confianza. Ante la falta de una dupla que pudiera romper la doble línea que proponía Santa Fe, tuvo que salir a remontar un marcador que, por el juego que demostraba, se veía muy lejano; al final, por poco lo consigue desnudando las falencias del rojo bogotano, sobre todo en las zonas laterales.

Por lo pronto, el DIM, que ocupa la posición 11°, recibirá al Atlético Huila en su estadio a las 07:30 p.m. el domingo en el cierre de la quinta fecha; entre tanto Santa Fe visitará al Deprotivo Cali a las 05:30 p.m. con la intención de lograr el primer puesto en la Liga Postobón II.