De local al DIM todavía le cuesta

8:00 de la noche en el Atanasio Girardot. Comenzaba un partido entre dos equipos con un único objetivo: ganar. Medellín buscaba la victoria para asumir el liderato en la tabla de posiciones. Boyacá Chicó, más que buscarla la necesitaba para salir del fondo de la tabla. Al final, un empate que poco contribuyó a las aspiraciones de ambos.

Inicio accidentado

Durante los primeros minutos del partido, este se vio interrumpido en numerosas ocasiones dadas las faltas recurrentes de ambas partes. El árbitro Lamoroux sentenciaba con su pito el detenimiento del juego ante el más mínimo contacto entre los jugadores. Con el pasar de los minutos, estos asimilaron tal característica del réferi, por lo que procuraron reducir las faltas para que así el juego ganara ritmo.

Comenzaron a acercarse de a poco ambos equipos a la portería contraria, pero sin llegar a generar jugadas que significasen un peligro real para los defensores rivales en primera instancia. Juan David Pérez pudo acercarse con claridad en un par de ocasiones, pero el arquero Estacio respondió de forma acertada, ahogando el grito de los más de 30.000 hinchas presentes en el Atanasio Girardot. Sin embargo, en el minuto 23, tras un saque de banda de Vladimir Marín, control de Juan Fernando Caicedo y pase a Brayan Angulo, quien sin parar el balón envió un centro justo a la cabeza de Hernán Hechalar, quien de esa manera mandó a guardar el balón al fondo del arco rival y puso así el 1-0 parcial en el marcador, y el cuarto en su cuenta personal esta temporada.

El partido por fin parecía tener un dominante y ese era Medellín. Pese a esto, tan solo poco más de diez minutos después del gol, el Rojo perdió a uno de sus defensores, Carlos Valencia, tras ver la segunda amarilla, lo que limitó los ataques del cuadro rojo y obligó al técnico Hernán Torres a replantear la estrategia sobre la marcha. Chicó, aprovechándose de la situación, recuperó de a poco nuevamente la posesión del balón y mediante esta consiguió menguar los ataques del cuadro local, terminando así la primera parte con el marcador en 1-0.

Segundo tiempo

Comenzó la segunda parte y, tras haber reorganizado tácticamente a su equipo -enviando a Andrés Mosquera a ocupar la posición de lateral derecho del expulsado Valencia y bajando a Didier Moreno de la primera línea de marca a ocupar el lugar dejado por Mosquera- Hernán Torres consiguió que por momentos fuera imperceptible la superioridad numérica de los ajedrezados, quienes por más que tenían el balón e intentaban hacer daño al cuadro local, fracasaban una y otra vez, siendo algunas de estas causadas por la respuesta efectiva de Anthony Silva, otras por el trabajo de la reconstruida defensa roja, y unas pocas por los remates desviados de los delanteros.

Boyacá Chicó se seguía acercando, mientras que los jugadores del DIM ya simplemente aguantaban agazapados dentro de su área, como si del equipo visitante se tratara. Llegó la expulsión de Quiñónes en el Chicó, y todo parecía indicar que el partido se equilibraría nuevamente en los últimos minutos, era la oportunidad perfecta para que el Poderoso se hiciera nuevamente con la posesión de la pelota y así el paso de los últimos minutos del partido fueran algo más fácil de llevar. Pero no fue así.

Medellín siguió procurando mantener alejado el balón de su área, sin importar si esto significaba regalárselo al equipo rival. Y fue tras una jugada de tal tipo que, a falta de menos de dos minutos, el equipo boyacense se hizo con la pelota en media cancha y tras un pase a un solitario Andrés González, que dio media vuelta y sacó un derechazo desde el borde del área que fue imposible de atajar para el paraguayo Silva, sentenciando así el 1-1 definitivo.

Estadísticas del partido

Lo que viene

Medellín jugará el próximo miércoles en condición de local frente al Atlético Huila; mientras que Boyacá Chicó recibirá a Patriotas en una nueva edición del clásico boyacense también en mitad de semana. Ambos partidos por la novena fecha de la Liga Águila 2015-1.

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