Expediente DIM: Otra vez la sexta fue esquiva

En el segundo semestre de 2014, el Deportivo Independiente Medellín tendría una segunda oportunidad para hacerse con la sexta estrella, pero esta fue arrebatada por Santa Fe.

Expediente DIM: Otra vez la sexta fue esquiva
Foto: Colprensa
juanpabloramirez
Por Juan Pablo Ramírez

Partido de ida

El 17 de diciembre pasado, el Estadio Atanasio Girardot fue el escenario del partido de ida de la Liga Postobón 2014-II, que disputaron el Deportivo Independiente Medellín e Independiente Santa Fe.

Medellín, consciente de su necesidad de hacer valer su condición de local, salió como una aplanadora. Tocaba la pelota por el ancho y largo de la cancha mientras los jugadores del onceno cardenal la miraban con impotencia, estirándose y tirándose para intentar arrebatársela, pero sin lograr conseguirlo. Y sería de esta manera que de a poco comenzarían las aproximaciones sobre el arco defendido por Camilo Vargas, quien en más de una ocasión impidió la entrada del esférico en el arco, para desgracia de los aficionados rojos.

Sin embargo, en el minuto 37, luego de un pase entre líneas de Christian Marrugo, aparecería Germán Cano, quien con el borde interno de su botín izquierdo mandaría el balón al fondo del arco sur, para así encender los gritos y cánticos de una hinchada que, por lo menos en ese momento, se sentía campeona.

En la segunda parte el juego se seguiría desarrolando de forma similar a la primera: Medellín manejaba la pelota -ya con la tranquilidad de estar en ventaja- y Santa Fe intentaba quitársela. No obstante, el cuadro dirigido por Hernán Torres buscaba marcar el segundo, conseguir el gol que les diera la tranquilidad, por lo que dejaba pocos hombres en defensa cuando iba al ataque.

Y así ocurrió que, sin que nadie lo anticipara, Francisco Meza marcó el gol del empate en el minuto 66, lo que dejó mudo al Atanasio. A causa de esto, Medellín emprendió una vez más al ataque, intentando poner la balanza una vez más a su favor. Sin embargo, en su intento por irse nuevamente a la cabeza, dejó solo con tres hombres en defensa de Bejarano, que no pudo hacer nada para detener el remate de Wilson Morelo que establecería el 2-1 definitivo.

De esta manera, cerca de 41.000 aficionados atestiguaron lo injusto que puede ser el fútbol, cuando vieron cómo el Poderoso resultaba perdedor de un partido que había dominado ampliamente en 87 de los 90 minutos jugados.

Partido de vuelta

Fue el domingo 21 de diciembre, en el Estadio Nemesio Camacho El Campín. Medellín llegaba con la necesidad de marcar un gol para forzar los penaltis, y Santa Fe con la ventaja de estar un gol arriba en la serie y contar con el apoyo de sus aficionados.

Así las cosas, comenzó el partido en el máximo escenario deportivo de la capital colombiana, con un Deportivo Independiente Medellín que se hizo con la pelota desde los primeros minutos de juego, pero que no pudo concretar ninguna de las numerosas opción de gol que generó.

Por su parte, Santa Fe intentaba mantener la pelota lejos del arco de Camilo Vargas, quien respondió con suficiencia cada vez que fue exigido por los delanteros del Poderoso de la Montaña. El cuadro capitalino también tuvo la oportunidad de marcar, pero al igual que Vargas, Carlos Bejarano estuvo atento al momento de impedir un gol que sería mortal para el rojo paisa -ese día de azul-.

Sin embargo, con el inicio de la segunda parte, apareció Luis Carlos Arias, quien con un potente remate raso puso a gritar a cerca de 45.000 aficionados.

Así, a Medellín no le quedó de otra que ir a buscar el partido con todo lo que tenía, por lo que Torres mandaría al campo a Daniel Hernández y Alfredo Morelos, quienes para desgracia del estratega rojo, poco pudieron hacer para reducir la ventaja en el marcador global (3-1 en ese momento), la cual solo se acortó en el minuto 90, cuando en medio de una sucesión de rebotes en el área albiroja apareció Andrés Mosquera. Faltando únicamente por jugarse el tiempo adicional, los diez jugadores de campo del Independiente Medellín se lanzaron al ataque con lo último que les quedaba, pero no fue suficiente.

Al final, sería Santa Fe quien se quedara con su octava estrella, impidiéndole una vez más un cuadro bogotano la alegría al Deportivo Independiente Medellín.