La cuestión de Atlético Nacional pasaba por el juego y no por el marcador. La imagen que dejó en el primer partido de la final ante el Deportivo Cali fue mala. El mediocampo de contención de Diego Arias y Elkin Blanco no pudo con la sociedad Fabián Sambueza-Nicolás Benedetti y Macnelly Torres, único creador fue controlado por Andrés Pérez y Kevin Balanta.

Eran dos goles los que tenía que hacer Nacional para forzar los penales y uno más si quería quedarse con la Liga Águila 2017-I sin necesidad de ir a la definición desde los once pasos.

La formación inicial de los 'verdolagas', como era de esperarse, sufrió cambios. Francisco Nájera entró por el suspendido Alexis Henríquez, Daniel Bocanegra volvió al lateral derecho tras su contusión y lesión en tobillo (luego del partido admitió que tuvo que infiltrarse), el doble cinco de quite de la ida fue reemplazado por uno más de juego con Blanco y Mateus Uribe, que volvió a su posición natural.

​Primer tiempo

Los dirigidos por Reinaldo Rueda salieron a toda máquina. Adelantaron sus líneas para presionar al Cali desde el inicio y esto tuvo éxito instantáneo. Cali pocas veces pasó la mitad de cancha. La otra clave fue poner a Uribe en el medio. Éste se movió por toda la cancha sin dar ninguna referencia y le dio más compañía a Macnelly Torres, que contrario a la ida pudo jugar de frente al arco y fue letal. La otra clave fue Andrés Ibargüen, quien encaró constantemente a Nilson Castrillón y se encargó de pedir más el balón a sus compañeros.

Como en la ida, una lesión hizo gastar un cambio, pero no la idea de juego. Farid Díaz, en su último partido con la camisa de Nacional, salió por un dolor en la ingle derecha a los nueve minutos y en su lugar entró Edwin Velasco.

Tan solo le bastó 15 minutos para igualar la serie. Primero fue Torres con un remate de media distancia a los siete y después Uribe, también con un disparo desde lejos.

Los locales no bajaron la intensidad, sin embargo, una serie de rebotes dentro del área tras un tiro de esquina le permitió a Jefferson Duque darle tranquilidad a los 'azucareros'. Con el paso de los minutos, Nacional bajó la intensidad, tal vez por cansancio.

A los 41 minutos salió la pintura de la noche. Tiro de esquina cobrado por Torres desde el sector derecho, nadie la tocó e Ibargüen dejó picar el balón y la ubicó en el ángulo. La serie quedaba igualada 3-3 al final de los primeros 45 minutos.

Segundo tiempo

Nacional intentó hacer lo mismo del primer cuarto de hora del primer tiempo, pero no pudo. Cali había cerrado los espacios por el medio y por las bandas, complicado el juego de Nacional. En ningún momento los locales demostraron impaciencia, por el contrario, se tomaban su tiempo para iniciar y reiniciar las jugadas.

En el minuto 73 llegó el quiebre. Balón filtrado de Torres para Dayro Moreno y Danny Rosero lo golpeó con su rodilla en el muslo y el juez Andrés Rojas decretó penal. Dayro lo transformó en gol, llegó a la cifra de 14 y por primera vez Atlético Nacional se ponía arriba en el global. De aquí en adelante, se quebró el juego. Cali desesperado por buscar un gol dejó espacios atrás y Rodin Quiñones sentenció la final con el quinto tanto de la noche a las 77 minutos. 

Nacional le ganó 5-1 a Cali (5-3 en el global), se adjudicó su título de liga número 16 y 28 en toda su historia.