Nacido en Necoclí Antioquia el 4 de abril de 1995, Yairo Moreno llegó al DIM desde muy chico, hizo todo su proceso formativo en el Poderoso de la Montaña, con el cual debutó en el año 2014, sin mucha continuidad para desplegar su talento en las filas del equipo rojo.

Para 2015, el zurdo se fue cedido a La Equidad, donde tuvo mayor continuidad y menor presión para desenvolverse con calidad en el terreno de juego durante 19 partidos con el Asegurador.

En 2016, el talentoso extremo regresó a la pretemporada con el DIM, sin embargo fue cedido nuevamente, en esa ocasión, sería Envigado, la llamada Cantera de Héroes, en la que el jugador paisa lograría explotar su talento en 32 partidos vestido de naranja para volver a llamar la atención del Poderoso, dueño de sus derechos deportivos.

Corría el mes de enero de 2017 cuando llegó una oferta del Río Ave de Portugal que se hizo a los derechos del jugador respetando de antemano su decisión de quedarse a préstamo en el club que lo formó, con el fin de lograr mayor rodaje en un club grande antes de ir a Europa.

Aquel primer semestre de 2017 Yairo desbordó su fútbol, mostró gran talento, dinámica y gambeta, a tal punto que por momentos varios sectores de la hinchada roja pedían su titularidad, la cual se dio en algunos partidos, para lo que terminó siendo un semestre muy bueno para el '14'.

Ese nivel del primer semestre contrastó con el del 2017-II, Yairo bajó notablemente su talento y las lesiones estuvieron a la orden del día para que el extremo no tuviese los minutos necesarios para continuar mostrando lo hecho a principio de año.

Análisis

La temporada 2017-II fue decepcionante para el DIM, errores directivos, técnicos y de parte de los jugadores, dieron como resultado una campaña que contrastó con las buenas campañas del Rojo en los últimos 4 años. De la debacle del Poderoso también hizo parte Yairo Moreno.

Al jugador de 22 años que destacó en el primer semestre con el equipo, lo persiguieron las lesiones en la segunda parte del año, el jugador apenas jugó 7 partidos, viniendo en 5 ocasiones desde el banco sumando todas las competiciones.

Sumado a lo anterior, el extremo acusó falta de actitud, luciendo junto a sus compañeros como un equipo estático, sin sorpresa y sin sacrificio del terreno de juego, de ahí las falencias en defensa y las dificultades para generar opciones de gol, misión en la que Yairo, en los pocos partidos que estuvo, ayudó poco, debido a la falta de despliegue físico que mostró y al individualismo que lo llevó a perder balones clave cuando tenía compañeros en posiciones cómodas en varias situaciones de juego durante el torneo.

Sus lesiones y el bajón en su nivel, fueron el mismo síntoma que sufrió todo el equipo y  que ayudaron a que el Rojo perdiera puntos importantes para terminar fuera de los 8 clasificados a las finales de la Liga Águila, quedar eliminados de la Copa Sudamericana y a ser subcampeones de Copa Colombia con una actuación irregular.

Para el 2018, Yairo espera superar completamente sus lesiones, prepararse mejor físicamente y consolidarse en el equipo de sus amores, para cumplir las expectativas y ser el jugador que a comienzos de año prometía tardes y noches gloriosas.