En un juego muy poco vistoso, con escasas oportunidades de gol, dejando más dudas que certezas, el equipo dirigido por Felicio Santos pudo remontar el partido que tenían aplazado de la fecha siete. Las adversidades parecen ser lo normal esta campaña en los rojos, dado que no solo lo futbolístico les está afectando, también los malos manejos desde presidencia y el bajo rendimiento de algunos jugadores por temas extradeportivos.

Desde el inicio, el cuadro de Barrancabermeja mostró la intención de querer tener la posesión del balón y atacar la banda del lateral Pablo Armero que durante todo el partido se vio vulnerada por la poca forma física del jugador y las carencias defensivas que viene mostrando. Los locales en temas ofensivos no generaron ninguna ocasión durante la primera etapa, dado que no había una conexión entre el medio campo y los delanteros era nula porque los atacantes, en especial Cristian Martínez Borja, se mostraron muy estáticos. El gol del cuadro visitante lo marcó Pablo Vranjicán al 38’, sentenciando el primer tiempo. Al salir al descanso, la hinchada escarlata mostró su descontento con el equipo propinándoles una abucheada acompañada de algunos insultos.  Se destaca que nuevamente las luminarias del estadio Pascual Guerrero volvieron a fallar dado que algunas se apagaron ocasionando la suspensión por dos minutos del cotejo.

En la etapa final, el conjunto del Valle del Cauca salió a querer llevarse el partido, pero no encontraba una forma de poder penetrar a los petroleros. Al 54’ tras un tiro de esquina de Juan Camilo Angulo y los graves errores en marca de Alianza, Carlos Lizarazo de cabeza puso la paridad en el encuentro. A pesar de haber encontrado el empate, los diablos seguían sin una claridad ofensiva. Momentos después, al 70’, una falta en la frontal del área y el sello de la casa del lateral derecho Angulo,  generó que los hinchas nuevamente se pudiesen parar de sus asientos a aplaudir tan estupendo gol a la escuadra izquierda del portero Jerez decretando el 2-1 final.

Las posibilidades matemáticas siguen existiendo para que el América pueda aspirar a pelear por la estrella 14. Sin embargo, su juego no ayuda a que tal sueño sea algo tangible. Aún tiene un partido aplazado frente a Independiente Medellín y su siguiente juego será frente a Once Caldas, el domingo 29 de abril en condición de visitante.