El Baloncesto Sevilla tenía la difícil tarea este domingo de lidiar con el equipo más en forma de Europa. El Valencia Basket llegaba a tierras hispalenses con una trayectoria impoluta hasta el momento este curso, sumando por victorias los ocho partidos de Liga Endesa y los ocho de Eurocup. La intención de los sevillanos, por tanto, no era otra que la de dar la campanada y conseguir derrotar al invicto conjunto de Pedro Martínez, una vez estabilizada la situación tras el mal arranque de campeonato.

Si ya de por sí la visita de Valencia Basket a San Pablo se antojaba de elevada complejidad, esta se veía agravada por la ausencia de un pilar en el equipo de Luis Casimiro como es Scott Bamforth. Su ausencia se confirmó justo antes del partido, después de arrastrar problemas en uno de sus aductores durante toda la semana. El puesto del norteamericano lo ocupó el canterano Cizmic en la convocatoria y Henton en el 'cinco' inicial.

La defensa y el desacierto, protagonistas

Fue el alero norteamericano de los más destacados en el primer tiempo por parte del CB Sevilla, que empezó el envite por detrás en el marcador merced a dos canastas fáciles primero de Hamilton y luego de Sikma, con un mate. Henton estrenó la cuenta de los sevillanos con un tiro de dos, pero el juego que estaban ofreciendo los de Luis Casimiro carecía de tensión. Dos pérdidas absurdas, con un pase a nada de Berni, y los síntomas de inoperancia que emitía Balvin endemoniaron al técnico manchego, entrando en cólera.

El bajo marcador benefició al Baloncesto Sevilla, llegando a remontar

El desacierto de Valencia Basket, potenciado por la defensa cajista, llevaron a un primer cuarto igualado, donde la máxima diferencia estuvo en seis puntos y que terminó 15-17 a favor de los visitantes. Esa misma tónica fue la que primó en los segundos 10 minutos, que arrancaron con un triple de Henton para poner a los suyos un punto arriba por primera vez en el partido, pero que rápidamente Shurna se encargó de enmendarlo con otro triple. Berni, que no entró con buen pie al partido, llevó a los suyos a estar nuevamente por encima en el electrónico 24-22. Con más de 5 minutos jugados del cuarto, el pobre parcial era de 7-5. El bajo marcador beneficiaba al Baloncesto Sevilla, mandando durante un período que tuvo su caducidad con un triple de San Emeterio justo antes de enfilar el túnel de vestuarios y que dejaban el encuentro 28-30.

Todo se terminó tras el descanso

No sentó bien el descanso a los pupilos de Casimiro, volviendo a la pista para verse desangrados por un Valencia Basket que, ahora sí, imprimió una marcha más con la que poner tierra de por medio. Las sensaciones eran que cuando los de Pedro Martínez quisieran, el partido se rompería, como así fue. El plus extra con el que arrancó el segundo tiempo el equipo valenciano vino de la mano de Rafa Martínez, quien tuvo que calentar la muñeca a conciencia en el calentamiento previo. El escolta anotó una canasta de dos y un triple nada más volver de vestuarios, a lo que Balvin respondió con dos puntos que llegaron seguidos de seis (triple y 2+1) de San Emeterio. Todo esto sumado a una nueva canasta desde más allá de la línea de tres provocaron un parcial determinante de 2-14 que ponían a Valencia 14 arriba.

Bostjan Nachbar no compareció hasta el tercer cuarto

Casimiro buscó frenar la racha taronja con un tiempo muerto. Nachbar y Berni tomaron conciencia, acercando a los de la avenida de Kansas City a su rival hasta los ocho puntos. El esloveno había estado desaparecido hasta el entonces, pero intentó reengancharse a tiempo y sumar en positivo. Sin embargo, ni él ni ninguno de los suyos logró reducir más la desventaja. La inspiración se había instalado en Valencia Basket. Rafa Martínez terminó el tercer período con 15 puntos (27 hizo su equipo), gracias a un acierto exterior del 100%, anotando los tres triples que lanzó.

Valencia no bajó el ritmo una vez lo cogió

Del de Santpedor se contagió Stefansson nada más comenzar el último cuarto. El islandés encestó un tiro de tres al que combidó con un 3+1. Nuevamente, desastrosos los primeros pasos del Baloncesto Sevilla en la pista. El parcial era CB Sevilla 0-7 Stefansson, lo que ponía a Valencia 15 puntos por encima. En ese momento Casimiro experimentó con Nachbar en el puesto de alero, dejando el juego interior en manos de Oriola y Slokar. La probatura no trajo consigo una mejoría palpable, teniendo en cuenta que los valencianos no bajaron el pistón y supieron leer perfectamente el partido, impidiendo a los locales bajar la diferencia de los 10 puntos. Respuestas constantes se encontraron. El acierto que no tuvieron en la primera mitad estuvo presente en la segunda, y eso destrozó a Baloncesto Sevilla, que sumó su sexta derrota del curso, por 67-81.

La descompensación en el juego interior entre uno y otro equipo resultó clave

Gran culpa de ello tuvo Rafa Martínez, MVP del partido, y la descompensación existente entre los interiores de uno y otro cuadro. Hamilton acabó con 15 puntos y Sikma, con una sola canasta, finalizó con 19 de valoración. Pelearon y lo intentaron los de Casimiro, quedando la duda de si no terminaron de creérselo o bien no pudieron frenar a Valencia cuando despertó. Pero al menos, compitió por cumplir el sueño de vencer al líder invicto.

Fotografía del texto: ACB