Algo debe cambiar en los Clippers. Tras las derrotas durante la madrugada del sábado en San Antonio y del día siguiente en Houston, los jugadores de Los Ángeles Clippers dudan sobre sus opciones reales a final de temporada. Muchos de ellos apuntan a su bajo rendimiento, entre ellos la gran estrella anotadora del equipo. “Tenemos que ser mejor que esto", dijo Blake Griffin. "Estamos mejor que esto y no estamos sabiendo demostrarlo".

A principios de temporada, muchos expertos catalogaban el roster de los Clippers como uno de los más fuertes de la liga, adjudicándoles bastantes opciones de hacerse con el título en junio. Aunque a finales de diciembre la verdad es que en 13 partidos contra equipos con un récord positivo, los Clippers están en 4-9. La primera derrota llegó contra Memphis. Luego ante Dallas sin Chandler Parsons y Wesley Matthews. Otras dos fueron contra los Detroit Pistons.

"No hemos ganado ninguno de los grandes partidos que hemos disputado", dijo Griffin. "Hemos perdido todos los partidos importantes". Los dedos ya comienzan a apuntar en direcciones generales, y muchos ya señalan a las nuevas piezas del equipo adquiridas durante el pasado verano. "No puede ser solamente culpa de los nuevos chicos. Cada equipo tiene algunos chicos nuevos", dijo Griffin.

DeAndre Jordan ofreció una versión más clara sobre lo que comentó su compañero. El pivot cree, al igual que Blake, que hay jugadores en el equipo que no aceptan su rol. "Todo el mundo sabe su trabajo", dijo. "Sólo tenemos que aceptar nuestros roles y la manera de jugar". Por lo tanto, en el vestuario de los Clippers está claro que la fórmula actual no está funcionando.

Chris Paul: "La parte más difícil es saber de lo que somos capaces"

El base del equipo tampoco se escondió, y declaró que todavía no son capaces de ver sus aspiraciones reales y que les queda mucho trabajo por delante. "Es un poco frustrante", dijo Chris Paul. "Hay una gran cantidad de equipos en este momento que de manera realista no tienen una oportunidad. Creo que para nosotros, la parte más difícil es saber de lo que somos capaces y saber que si lo averiguaremos podemos ser peligrosos. No somos un equipo en el que nadie tenga que preocuparse. Por lo menos en este mismo momento", dijo Paul. "Todavía tenemos mucho trabajo que hacer para volver a ser los mismos del año pasado, y para ello ahora mismo tenemos menos confianza que el curso pasado".

"Tienes que ser honesto contigo mismo o con tu equipo", dijo Griffin."Este es un momento de la temporada en el que algo tiene que cambiar o no vamos a alcanzar una buena posición en la clasificación de cara a los playoffs".