Ambos equipos buscaban un triunfo que los saque del sendero irregular que vienen transitando. Si bien las dos franquicias se encuentran con récord positivo y dentro de la zona de playoffs, los tejanos querían terminar con la racha inestable que están viviendo en este mes y por parte de los canadienses, perdieron tres de los últimos cuatro partidos y sumado a esto, su entrenador había calificado como vergonzosa la actuación del domingo pasado ante Sacramento y debían redimirse ante su gente.

La mejor cara de los Raptors

Toronto arrancó el partido mucho más enchufado que Dallas y ya en la primera posesión Kyle Lowry convirtió un triple impecable. Se notaba a los canadienses más activos y con un juego más dinámico que parecía que se iban a llevar por delante a los tejanos. El parcial de 12-2 en los primeros minutos de juego obligó a Rick Carslile a utilizar su primer tiempo muerto para reordenar a su equipo. Sin embargo, los Mavs seguían sin poderle encontrar la vuelta al encuentro y Toronto mantuvo la distancia en el marcador sin problema e incluso la aumentó hasta 13 de diferencia. Un par de acontecimientos al final del primer cuarto funcionaron como una muestra de lo que venía sucediendo con ambos equipos. Primero le pitan falta técnica a Raymond Felton e inmediatamente DeMare DeRozan realiza un tremendo alley-oop. Recién faltando dos minutos llegaron los primeros puntos de Dirk Nowitzki y el cuarto terminó 32 a 16 con un 60% y 28% de tiros de campo para Toronto y Dallas respectivamente.

Toronto empieza a perder consistencia 

Ya desde el comienzo mismo del segundo periodo, se empezó a ver otra cara de los Raptors, una más parecida a la que se venía viendo en los últimos encuentros. Rápidamente parcial de 7-0 para los Mavs y más dos minutos sin anotar para los Raptors. Dallas ajustó mejor su defensa y Toronto se empezó a quedar sin ideas en ofensiva. El parcial llegó hasta 11-0 hasta que Terrance Ross cortó la racha adversa con un triple. Cuando parecía que Dallas se adueñaba del partido, Toronto pudo volver a imponerse de la mano de DeMar DeRozan que ya se encaminaba como la figura del juego. Se fueron al descanso con ventaja de 13 puntos a favor de los canadienses.

Los Mavs toman el control

En los primeros minutos del cuarto se vieron dos equipos con mucha efectividad intercambiando canastas, algo que no beneficiaba a los visitantes. No obstante, lo de Toronto no pasaban de su efectividad, ya que su juego era cada vez más pobre y prácticamente todas las jugadas terminaban con jugadas individuales por parte de DeRozan o Lowry. Pero esto no persistió mucho tiempo, debido a que su ataque fue cada vez más previsible y los Mavs empezaron a defender con facilidad. Lograron acortar a tres puntos una diferencia que había llegado hasta 18. Los Raptors ya llevaban 13 perdidas a esta altura del partido.

Los triples salvan a los Raptors 

Dallas continuó jugando con más orden a pesar de ir atrás en el resultado y daba la sensación que estaban por revertirlo. Sin embargo, empezaron a llover triples por el lado de Toronto. Cuatro casi consecutivos lograron extender la ventaja a 16 para los locales. No obstante, el partido no se cerraba. Más por carencia de juego de los Raptors que por mérito de los Mavericks, que sacaron ventaja de esto y achicaron la diferencia hasta cinco con menos de dos minutos por jugar y con la segunda unidad en la cancha. El partido terminó muy apretado por 103 a 99 para los Toronto Raptors que en los últimos segundos estuvieron tan solo a 1 punto de los Dallas Mavericks. DeRozan fue el goleador del juego con 28 puntos y Lowry se despachó con 17 puntos 10 rebotes y 7 asistencias.

Toronto fue muy de mayor a menor y deberá mejorar su rendimiento en equipo si tiene aspiraciones de llegar lejos en los playoffs. Ahora viajarán a Milwaukee para visitar a los Bucks en la noche del próximo sábado. Por el lado de Dallas, continúan sin poder salir de este mes tan irregular. Pero tienen la oportunidad de cambiar la cara rápido, cuando esta noche visiten a los Nets en Brooklyn.