En la madrugada de ayer tuvo lugar uno de los enfrentamientos más esperados en este comienzo de temporada, el que enfrentaba al primero y segundo de la conferencia oeste, o lo que es lo mismo, Golden State Warriors contra Los Angeles Clippers. A pesar de que se esperaba un duelo competido y reñido hasta el último momento, los de Steve Kerr no dieron opción alguna a los locales, que cayeron derrotados por 17 puntos de diferencia.

Uno de los protagonistas de la noche antes de que comenzase el choque  era Marreese Speights, que se enfrentaba a su ex-equipo y con los que ganó el Anillo en 2015. Tras el partido, fue cuestionado acerca de qué es lo que tenían que hacer los Clippers para ser por fín un candidato real a ganar el campeonato. "La verruga" fue claro, directo y algo crítico, al menos con lo visto en las últimas temporadas.

“Lo primero que debemos hacer es dejar en paz a los árbitros”, dijo el de Florida en un tono muy sincero. “Los chicos tienen que sacrificarse, tenemos que hacer algo más que simplemente anotar, hacer otras cosas que vayan más allá tus metas personales, esto es un equipo. Simplemente hay que intentar algo nuevo. Llevan haciendo esto que te he dicho cuatro o cinco años y no ha funcionado, así que creo que ya  es momento de hacer algo nuevo”.

También el entrenador, Doc Rivers, se mostró descontento, al menos con lo visto en el encuentro. "Pienso que no tuvimos espíritu. Hubo momentos en los que estuvimos en el partido, pero en general no estábamos concentrados. A veces pasa, hay partidos en los que no juegas bien y pierdes" comentaba Rivers con respecto a la actitud de sus chicos. "En cuanto al juego, debemos arreglar el tema de las pérdidas de balón como grupo. Cuando te metes en un agujero contra un equipo que lanza tan bien, es muy difícil. Todos los jugadores salieron a jugar pero perdimos espíritu con las pérdidas de balón"; lo que apreciaba respecto a lo puramente deportivo. Habrá que ver como sientan las palabras de un veterano como Speights. Lo conveniente sería escucharle, aceptar la crítica constructiva, pero nunca se sabe.