Una vez más, LeBron James salió a dar la cara. Tras la dura derrota en el tercer encuentro de las series frente a Indiana Pacers, los periodistas americanos centraron sus preguntas en el rendimiento de los compañeros de James. Ante esta situación, "The king" se molestó y no dudó en defender a cada uno de ellos, abogando por la unión del grupo: "¿Pensáis que voy a tirar por tierra a mis compañeros? No lo haré. Necesitamos mejorar nuestro juego de manera colectiva", respondió. 

Con sus palabras, James llamó a la calma en rueda de prensa y comentó que "hay aún mucho en juego". Sin embargo, no quiere relajaciones y cree que todos los partidos que vengan de ahora en adelante son finales para ellos: "Ya he vivido esta situación antes. Cada partido es una final, y debe ser ganado." Añadió. 

La importancia de los detalles

LeBron James está experimentando una sensación de liderazgo poco común en su trayectoria. Desde sus inicios, el peso de un equipo entero no recaía única y exclusivamente sobre sus hombros. Si bien es cierto que su importancia ha sido siempre capital, ha encontrado apoyo en jugadores como Wade o Irving en etapas anteriores. Sin embargo, el rey lo está haciendo muy bien y ha sabido construir un grupo que se muestra unido ante las adversidades. 

En la noche de ayer, "The king" le preparó una sorpresa a sus compañeros. Los quince integrantes de la plantilla de Cleveland Cavaliers llegaron al Bankers Life Fieldhouse de Indiana con trajes a juego diseñados por Thom Browne. LeBron James encargó tal "outfit" para buscar la unión de todo el vestuario y dar sensación de equipo. 

La inversión total de LeBron James en este detalle ronda los 70.000 euros, de acuerdo con las informaciones del periodista de ESPN, Dave McMenamin.