Tobias Borg (Södertälje, Suecia, 23 años) llegó a Bilbao en verano de 2014 procedente del Sodertalje Kings sueco, siendo así una apuesta del conjunto bilbaíno de cara al futuro. Pero tras dos temporadas jugando con los colores de Dominion Bilbao Basket, parece ser que su progresión como jugador de baloncesto se ha visto estancada. Durante estas dos últimas campañas, el base-escolta sueco ha disputado un total de 50 partidos, jugando una media de 8 minutos por encuentro y promediando 2'8 puntos, 0'5 rebotes y 0'4 asistencias para 1'4 créditos de valoración.

Esta temporada luchará con Jonathan Tabu y Javi Salgado por tener minutos de calidad en pista y deberá de dar el salto que todos esperan de él. La campaña anterior las lesiones lastraron su progresión y el joven talento sueco no dispuso de continuidad para demostrar lo que se espera de él. Lo imponente de su físico, su verticalidad y lo mucho que ha aprendido junto a Raül López debe brotar, y demostrar así que todas las esperanzas que hay depositadas en su juego no son infundadas. Esta debe ser su campaña, y el propio jugador lo sabe. Carles Duran lo espera y la Marea Negra lo sueña.

El sueco tiene que aprovechar esta temporada que está a punto de empezar, una temporada que, como declaraba el capitán del equipo, Álex Mumbrú, los jugadores llegan con ilusión y ganas de hacer un buen papel tanto en la Liga Endesa como en Eurocup. Es un jugador versátil, además de explosivo, aunque todavía no haya dado el salto de calidad que se suponía que llegaba a Miribilla. Por ello, el margen de mejora de Borg es grande en un equipo que apostará por los jóvenes en el nuevo proyecto. Rápido y eléctrico, cuenta con una gran defensa, además de ayudar siempre al equipo, aunque su debilidad es las dificultades que encuentra para lograr puntos ofensivos, una de las carencias a mejorar este curso para ser un hombre importante.