10 días después, el Valencia Basket volvía jugar en casa. La Fonteta recibía al Olimpia de Milano, que la visitaba por segunda vez tras conseguir llevarse la victoria en la temporada 2010-11. Valencia Basket necesitaba ganar para salir de su mala racha en competición europea, donde cayó derrotado en el último partido, contra CKSA de Moscú, por un contundente 94 a 67. Por su parte, el Milano tampoco pasa por un buen momento en la Euroliga.

Primera parte igualada

El partido arrancó de la mejor manera para Valencia, que conseguía sus primeros puntos desde el triple gracias a Dubljevic. En las siguientes jugadas, los dos equipos no lograron anotar pese a la intensidad de unos primeros minutos que denotaban que iba a ser un gran partido. El Milano remontaba el marcador con una canasta de dos y un triple, pero Van Rossom contestaría pronto para    que Valencia siguiera mandando en el eléctronico (6-5). Valencia notó la presencia de “Dubi”, que conseguía anotar fácilmente desde debajo del aro.

El partido estuvo muy igualado en los primeros 10 minutos, en los que destacó el gran acierto de los dos equipos desde la línea de 6,75m. Theodore fue clave para que el Milano mantuviera el ritmo que exigió Valencia, que una vez más dependía de Green en su juego (20-19).

El segundo cuarto arrancó con una gran ofensiva del conjunto italiano, a la que contestaba Vives con un triple. Valencia no se amedrantó y metió la sexta marcha gracias a Tibor Pleiss, que anotó cinco puntos seguidos para poner la máxima de los de Hermanos Maristas (30-24). Tibor siguió ayudando al equipo taronja con rebotes y anotó otra canasta de dos. En la siguiente jugada, Cinciarini anotaba un triple que, rápidamente, contestó Rafa Martínez para el conjunto entrenado por Txus Vidorreta (34-29).

Después, Valencia tuvo una serie de despistes que provocaron que Milano empatara el partido a 34. El cuadro alpino plantaba cara a los valencianos, y Jefferson machacaba el tablero para poner por delante a los italianos en el electrónico (34-36). Valencia parecía reaccionar gracias a San Emeterio, que consguió un 2+1 en la siguiente jugada, después del tiempo muerto. Milano no bajó la intensidad y estuvo liderado por un colosal Goudelock, que era capaz de anotar un increíble triple sobre la bocina. Acto seguido, ’Saneme’ consiguió un nuevo 2+1 que prosiguieron ‘Dubi’ y Van Rossom desde el tiro libre para terminar el segundo período con una ventaja de +4 para Valencia (45-41).

Dos prórrogas de infarto

Tras el paso por vestuarios, los dos equipos salieron con las pilas cargadas de intensidad. Ambos siguieron con un gran acierto en el tiro de tres. Green lideró una vez más el juego de Valencia, que empezaba a marcharse en el marcado al conseguir la máxima del partido (56-45). Tras el tiempo muerto, Doornekamp anotaba un triple para aumentar la ventaja de los de la Fonteta a +14. Valencia continuó con su festival anotador encabezado por el norteamericano Green, que lograba un 2+1 (62-45). Goudelock hizo reaccionar a Milano desde el triple, tras varios minutos sin anotación. En la siguiente jugarda, Cutis robaba el balón a Sastre y anotaba de dos con facilidad para recortar distancias. El Milano apretaba y una canasta de dos de Gudaitis les puso a 10 puntos (62-52). Tras el tiempo muerto pedido por Valencia, Goudelock anotó otra canasta de dos seguir manteniendo vivas las esperanzas del conjunto italiano. El parcial de 2-13, llevado a cabo por el conjunto milanés, les dio opciones para los últimos diez minutos de encuentro (64-58).

El último cuarto empezó con un triple de Jerrels, que reducía la distancia del equipo rival a los tres puntos. San Emeterio despertó a Valencia, con un 2+1, para llevarse la ovación del público de la Fonteta. El Milano siguió haciendo su partido y Kalnietis anotaba un triple que silenciaba todo el pabellón (67-64). Cuando mejor estaban los italianos, Goudelock se retiraba lesionado. Los rivales, que perdieron a su mejor hombre, no se vinieron abajo y Jefferson enchufaba un triple que les colocaba a dos puntos de Valencia. La Fonteta hacía presión y Van Rossom contestaba con un triple que levantaba al público de su asiento (72-69).

En las siguientes jugadas, los dos equipos pecaron de imprecisiones que apenas hacían variar al marcador (74-72). En el último minuto de partido, Valencia contó con dos posesiones seguidas que finalizaron sin anotación. A falta de 20 segundos para el final, el equipo de Milán empataba el partido a 74 forzando la prórroga. Green tuvo la última jugada de Valencia para llevarse el partido, pero el triple no entró y el partido se marchó a la prórroga (74-74)

Los cinco minutos adicionales fueron una locura. Los dos equipos anotaron tres triples cada uno en una auténtica exhibición de baloncesto. Esa máxima igualdad provocó otros cinco minutos de prórroga, en los que el Milano llegó mandar de cinco puntos en el marcador. Van Rossom falló dos tiros libres y, en la siguiente jugada, Theodore encestó un triple que puso la máxima de los italianos en el partido (85-93). Dubljevic tiró del carro para que Valencia tuviera opciones hasta el final, pero Jerrels hizo que esas esperanzas se desvanecieran con un triple que sentenciaba el partido. El partido finalizó con ‘Dubi’ en el tiro libre, que no pudo hacer nada para evitar la tercera derrota consecutiva de Valencia en Euroliga (98-103).

El próximo compromiso de Valencia Basket será el viernes día 17, cuando el equipo de Vidorreta visite la pista del FC Barcelona Lassa en una nueva jornada de Euroliga.