Durante semanas los dos primeros puestos en el draft se daban por hecho. Markelle Fultz la estrella de la universidad de Washington sería el elegido por Boston Celtics en primera posición, seguido por Lonzo Ball de UCLA que se quedaría en casa ya que sería el elegido por los Lakers en el pick No. 2. Pero conforme se acerca la hora en la que Adam Silver anuncie quien tendrá los derechos de las futuras estrellas del mejor baloncesto del mundo.

La franquicia del estado de Massachusetts, los Celtics, acabarán haciendo factible lo que los periodistas y aficionados presagiaron el 16 de mayo, el día de la lotería del draft, y reclutarán a Fultz. Pero ahora hay rumores de que el alero Josh Jackson de la universidad de Kansas podría acabar en el puesto número 1 porque es una mejor opción para el quinteto del finalista de la conferencia Este. Tampoco se descarta la opción de una negociación con la elección para intentar conseguir una estrella y competir contra los Cavaliers.

Hace unos meses, los Lakers entregaron las llaves de la organización a una de sus más grandes leyendas de todos los tiempos, Magic Johnson, cuando lo nombraron presidente de operaciones de baloncesto. Muchos lo vieron como una transacción dulce y fácil para Johnson por la gran cantidad de talento sin explotar que ya tiene en plantilla el equipo de California. Además de las jóvenes joyas que tiene en el vestuario se ha encontrado con la irrupción de Lonzo Ball y la expectación que genera el nuevo ‘héroe local’ y la esperanza por parte de los aficionados para ser la estrella de Showtime 2.0.

Pero ayer por la mañana Fultz tuvo un entrenamiento en Los Lakers y en la organización se han deshecho en elogios hacia el jugador. El jugador de la universidad capitalina habló sobre los jugadores que suenan para los Lakers y que han entrenado como él (Ball y Fox) “Los respeto a todos, todos tienen distintos tipos de juego”, opinó. “Creo que (cumplo) en ambos lados de la cancha y esa es la diferencia, estaría encantado de jugar aquí” Sentenció el previsible número 1 del Draft. No está en su mano tener una placa con su nombre en los aparcamientos del Staples Center sino de Boston. Pero si finalmente suena la campanada y deciden apostar por la elección de Jackson podría tambalearse el proyecto de la familia Ball. Como buen director de operaciones Magic Johnson no ha querido mojarse ya que en estos casos la discreción es la baza más peligrosa de las futuras negociaciones.

Según ESPN y otros muchos expertos, sitúan a Lonzo Ball en Los Angeles ni siquiera ha entrenado con Boston según los informes de la NBA. Sin embargo si acudirán a las conversaciones con otras franquicias que lo han solicitado, él y su padre.

Mientras tanto, en los Sixers, que tienen la tercera elección, también hay muchas dudas sobre cómo va a actuar la noche del jueves. La mañana de ayer entrenaron al el escolta de Kentucky, Malik Monk. Aunque se le atribuye el interés por Josh Jackson, este entrenamiento y las opiniones que ha generado el chico se ha elevado la especulación sobre un posible trueque con el pick. El comercio más factible es el de los Sixers con los Kings, renunciar a la tercera selección por la quinta y décima. Podría ser un gran acierto para los Sixers, pero no tanto para los de Sacramento (aunque su mal hacer en con los traspasos es más o menos su modus operandi). Los Kings, tras la marcha de DeMarcus Cousins a mitad de temporada, están inmersos en una reconstrucción total.

Sea como fuere y pase lo que pase las suposiciones y rumores acabaran dentro de una semana, hasta entonces seguiremos informando.