Hay que remontarse a 2010 para ver a un 'joven', es decir, ciclista con 25 años o menos, vistiéndose el maillot amarillo del Tour de Francia y llevándose la clasificación general final. ¿Recuerda quién era? Pues sí, en 2010 el ya retirado luxemburgués Andy Schleck con 25 años consiguió el cetro del ciclismo mundial. Es por ello, que los jóvenes, desde la primera edición de 1903 han sido determinantes en el transcurso de la carrera. Incluso en 1904, un 'chavalín' de tan sólo 19 años y de nombre Henri Cornet sorprendió a media Francia con una victoria histórica (y es que, a día de hoy, 112 años después, sigue manteniendo el record del vencedor del Tour de Francia más joven de la historia).
Sin embargo, habría que esperar 71 años para que se realizase la primera clasificación oficial de jóvenes dónde míticos como Fignon, LeMond, Pantani, Ullrich o incluso el madrileño Alberto Contador han escrito sus nombres. Nombres propios, que incluso en más de una ocasión, han sido los vencedores finales de la Grande Boucle. Entre ellos, Fignon en 1983 cuando corría en las filas del histórico Renault, Jan Ullrich en 1997 (Team Telekom) o Contador en 2007 cuando vestía el maillot del Discovery Channel. ¿Podrá este año repetir algun joven tal hazaña? ¿Quién seguirá los pasos de Nairo Quintana, Pinot o Van Garderen, entre otros?
Tom Dumoulin: potencia, constancia y determinación
"El Tour es el entrenamiento perfecto para Tom de cara a Rio 2016" (Helmantel, Entrenador Jefe)
Sin duda alguna, el holandés de 25 años natural de Maastricht (Países Bajos) es una de las grandes perlas del pelotón internacional. A pesar de cosechar puestos de relativo prestigio como el sexto puesto de la Vuelta 2015, el podio en el Tour de Suiza 2015 o la quinta posición en Romandía 2016 aparte de sendas victorias de etapa, a Tom Dumoulin (Giant - Alpecin) todavía le falta esa gran actuación que le conforme como uno de los grandes ciclistas del panorama internacional. Con nueve victorias como profesional en la disciplina de contrarreloj individual, Dumoulin destaca por su potencia en momentos clave y también por su perseverancia en etapas de media y alta montaña. Lejos de grandes escaladores en la actualidad, si es verdad que Dumoulin mantiene ciertas aptitudes para la escalada como ya demostró en la anterior edición de la Vuelta a España en finales en alto como Caminito del Rey o Cumbre del Sol. Lo cual, junto a sus habilidades para la contrarreloj le hace ser uno de los corredores más deseados del pelotón. No destaca por sus ataques, ni sus movimientos, pero Tom Dumoulin siempre está ahí peleando por la victoria y es por ello, que el holandés es uno de los jóvenes a los que habrá que vigilar. Nadie imaginaba ese nivel de Dumoulin en la Vuelta, ¿quién sabe si sorprenderá en la 102ª edición del Tour?
Lo que está por ver será su rol en el equipo con un Warren Barguil (Giant - Alpecin) que será la referencia en la alta montaña. Todo dependerá de la forma en la que se encuentre el francés durante la primera semana en finales clave como el de Le Lioran (5ª Etapa), o el de Andorra (9ª Etapa). Dumoulin podría ser ese as bajo la manga en caso de que Barguil falle.
Respecto a la temporada, cabe destacar la crono inicial que se llevó en el Giro d'Italia y la consecuente defensa del maillot rosa, sumado a un meritorio quinto puesto en la general del Tour de Romandía y un top-5 en la general de Omán a principios de año.
A fin de cuentas, Dumoulin es ese tipo de ciclista que como esté en un buen estado de forma puede dejar con la boca abierta a más de uno. Habrá que estar pendiente, en el Giro antes del abandono por problemas en el glúteo se le vio en muy buenas condiciones. ¿Será la revelación del Tour?
Romain Bardet: la eterna promesa francesa
"Es un líder nato. Seguro que despuntará"
(Mikael Cherel)
Si hubiera que definir a Bardet, varios coincidiríamos en que el francés natural de Brioude es la eterna promesa de su país que no acaba de explotar del todo. Tras sorprender a medio mundo en 2013 siendo 15º en la general del Tour con tan sólo 22 años, Romain Bardet (AG2R La Mondiale) tuvo la oportunidad de su vida en un Tour mermado de estrellas, el Tour de Francia 2014, dónde solo pudo ser sexto. Un año después, la temporada 2015 se presentó como la "temporada donde Bardet iba a explotar". Tras un muy buen inicio de año con varios top-10 en las generales de Vuelta a Andalucía, Romandía y Duaphiné, Bardet ganó muchos enteros de cara al Tour. Sin embargo, tras perder tiempo en los memorables abanicos de Utrecht y aquel inquietante pavés de la cuarta etapa, las opciones de Bardet se empezaban a esfumar en tan sólo cuatro días de carrera. Unas opciones que finalmente desaparecieron en el primer test serio del Tour 2015, La Pierre de St. Martin dónde se dejó casi ocho minutos.
Es por ello, que a día de hoy, no se puede considerar del todo a Romain Bardet como un corredor para las generales. Sin embargo, su combatividad, actitud y esfuerzo hacen de Bardet uno de los corredores más explosivos de pelotón, de esos que gustan a todo aficionado al ciclismo. Ya lo demostró en la anterior edición del Tour llevándose la victoria en la décimo-octava etapa tras culminar una fuga de manera magistral. Lo cual, le permitió luchar con el británico Chris Froome por el maillot de la montaña. Objetivo que al final no pudo conseguir.
El 31 de enero de 2016 se iniciaba una nueva temporada para el francés. Un año que por ahora es bastante satisfactorio. En febrero quedó segundo en la general de Omán por detrás de Vincenzo Nibali, y en marzo se consolidó con un top 10 en la general de la París Niza. Lo cual le sirvió para ganar confianza y pelear por la victoria en la Volta a Catalunya (sexto en la general) y en Trentino (también sexto en la clasificación final).
El culmen final sería el Criterium du Dauphiné, dónde después de un mal Tour de Romandía, Bardet resurgió y consiguió un gran segundo puesto en la general por detrás de Froome y por delante de rivales de la talla de Dan Martin (Etixx - Quickstep), Richie Porte (BMC Racing Team) o Alberto Contador (Tinkoff).
En definitiva, si mantiene una cierta consistencia en etapas claves de alta montaña y además se muestra combativo durante la ronda gala, Bardet puede acabar por explotar, como muchos expertos afirman. Viene mejor que nunca, con confianza y con toda la ilusión por ser determinante en la carrera de casa. Mucho 'ojito' a Bardet. Firme aspirante al maillot blanco, de lunares y por qué no, al top 10 de la Grande Boucle.
Julian Alaphilippe: llegó la hora de destacar
"No sabemos dónde acaba su potencial" (Patrick Lefevere)
El sentido común diría que no cabe esperar mucho de un joven de 24 años que jamás ha disputado la prueba ciclista más dura del mundo, pero en este caso, Julian Alaphilippe (Etixx - Quickstep) es una excepción.
Los números hablan por sí solos. En tan solo dos temporadas de profesional, ya sabe lo que es pisar en dos ocasiones el pódium de clásicas míticas como la Flecha Valona (2015 y 2016) y Lieja Bastoña Lieja (2015). Además de haber sido top-10 en la Amstel Gold Race en dos ocasiones y en la Clásica de San Sebastían de 2015.
El mayor de los Alaphilippe está llamado a ser unas de las grandes figuras de la historia del ciclismo. Su carácter y la personalidad que derrocha encima de la bicicleta es única y por esa razón Alaphilippe ya tiene a medio mundo mirándole allá por dónde vaya. Buen ejemplo de ello ha sido el AMGEN Tour of California de este año. Tras llevarse la victoria en la etapa reina de Santa Barbara, permaneció en la lucha etapa tras etapa, lo que le llevó al triunfo final.
Un triunfo que le daría alas de cara al Criterium du Dauphiné. Tras disputar etapas con final al sprint y de media montaña, Alaphilippe miró más allá y se lanzó a por la pelea de la general. Tras aguantar bien en la etapa de montaña, Alaphilippe fue sexto por detrás del español Alberto Contador.
Es por ello, que Alaphilippe es un corredor todoterreno. Pero con todas sus letras. Todoterreno en estado puro. Así pues, ¿qué puede pasar en el Tour? Pues que al no estar acostumbrado a pruebas de tres semanas flaqueé y sea una gran decepción o que al contrario, se vuelva a superar y debute en la ronda gala a su manera. A la manera de los grandes referentes de este deporte.
Al contrario que Bardet y Dumoulin, los cuales habrá que vigilar en etapas puntuales, en el caso de Alaphilippe habrá que estar atento los 21 días de Tour. Puede saltar en cualquier etapa, cómo quiera y cuándo quiera. Su corta pero victoriosa trayectoria le avala. Sin duda alguna, está ante el debut de su vida. Un punto de inflexión que le puede llevar a lo más alto o a ponerle los pies en el suelo.
Warren Barguil: a seguir creciendo
"Nuestro objetivo aparte de la victoria de etapa es ver las posibilidades que Warren tendrá para la general"
(A. Visbeek, Entrenador, Giant - Alpecin)
Esto va de franceses, y es que este año está claro que la pelea por el maillot blanco va a estar protagonizada por el talento francés. Un escalón por debajo de Bardet, el francés de 24 años natural de Hennebont (Bretaña) es la baza principal del Giant - Alpecin de cara a la general.
Tras liderar el conjunto holandés en la edición pasada, Warren Barguil sólo pudo ser decimoquinto en la general. Un Barguil que se le vio falto de experiencia, pero con muchísimo margen de mejora. Dejó algunos destellos en finales como St Jean de Maurienne, pero nada de otro mundo. Cabe destacar que sólo tenía 23 años.
Sin embargo, en 2016 sí se le ha visto esa madurez que en algunos casos escaseaba en carreras como Flecha Valona o la Lieja - Bastoña - Lieja. La guinda del pastel fue el Tour de Suiza, dónde se le vio bastante bien en etapas de montaña peleando con ciclistas del calibre de Tejay Van Garderen (BMC Racing Team), Rui Costa (Lampre - Merida), Ion Izagirre (Movistar Team) o el británico Geraint Thomas (Team Sky).
Lo que está claro es que este año Barguil llega mucho más fuerte que el año pasado. Con tan sólo 25 días de competición, parece ser que el calendario de Barguil está hecho a medida para el Tour con un sólo objetivo: estar entre los diez primeros o destacar en la lucha por los puntos de la montaña.
Siendo sinceros, Barguil no está para un top-5 en una carrera con Froome, Contador, Porte, Quintana y Nibali de por medio. Es por ello, que Barguil podría apuntar al maillot de la montaña y a la victoria de etapa. En definitiva, este Tour debería ser un 'pasito' más hacia el crecimiento de dicho corredor con el objetivo de ganar más experiencia y deslumbrar en un futuro que esperemos que sea próximo. Todo dependerá de la mentalidad y la actitud con la que se tome la carrera. Tiene las capacidades, pero tiene que saber bien a dónde apuntar.
Adam Yates: a consolidar la actuación del año pasado
"Tanto él como el equipo prefiere la etapa a pelear por un top-10 en la general"
(M. White, Director Deportivo, Orica GreenEDGE)
El principal deseo de Brailsford (Director Team Sky), Adam Yates (Orica - GreenEDGE), ya enseñó algunas de sus cartas en la edición pasada. Disputó el final en el Muro de Bretaña y aguantó en La Pierre de St. Martin ante la increíble actuación de los que en su momento fueron los "splash brothers" del ciclismo: Richie Porte y Chris Froome (Team Sky). Mientras algunos veteranos estallaban, el joven de 22 años Adam Yates siguió firme, con la cabeza bien alta e intentando reducir la máxima diferencia posible. Sin embargo, en la jornada siguiente acusaría el cansancio y perdería casi 16 minutos en Cauterets.
Lo que se puede sacar de dicha actuación es que Yates tiene capacidades para el ascenso, pero aún le falta algo de experiencia y conocimiento de su propio cuerpo.
Un año después de dicho episodio, el ciclismo le ha sonreído al pequeño de los gemelos Yates. Consiguió llevarse la victoria en aquella confusa Clásica de San Sebastián del año pasado, aparte de un meritorio podio el Tour of Alberta y un segundo puesto en el Grand Prix Cycliste de Montréal. Yates empezaba a despegar.
En relación a esta temporada, Yates no ha estado tan presente como se esperaba a principios de año. Un par de top-10 en pruebas menores y actuaciones muy mejorables en Tirreno y País Vasco.
A modo de calentamiento, el recién nacido Tour of Yorkshire le sirvió para ganar algo de confianza en la última etapa y conseguir el cuarto puesto en la general.
Tras Yorkshire, vendría Dauphiné, y con él, las primeras sonrisas. Tras estar en la pelea por la etapa reina y permanecer con los mejores en las etapas de alta montaña, Yates fue séptimo en la general dejando un mensaje claro: está en forma y él es el único que se puede fijar límites.
Respecto a su futura actuación en el Tour, Yates transmite mucha incertidumbre. Es capaz de buenas actuaciones, pero tiene un ritmo muy irregular durante las grandes vueltas. Estar entre los diez primeros en la general ya sería un auténtico triunfo.
La lista no acaba
A pesar de que los cinco ciclistas mencionados podrían ser los principales focos de atención en relación a los jóvenes presentes en la carrera hay muchos otros que podrían ser la gran sorpresa de la ronda gala.
Wilco Kelderman (Team LottoNL - Jumbo) o Louis Meintjes (Lampre - Merida) son otros de los nombres propios que podrían despuntar en el Tour. Kelderman por su parte arrancó bastante bien en la Vuelta a Andalucía con un cuarto puesto en la general, para después ser décimo en la general de la París Niza y octavo en el Tour de Suiza. Sin embargo, el holandés está muy lejos del nivel ofrecido en el Giro y Dauphiné 2014. Será su segundo Tour, después de participar en la edición anterior dónde apenas se le vio.
En referencia a Meintjes, el balance es más positivo que el de Kelderman. Se le vio algo en las etapas de montaña de Dauphiné y fue décimo en la Vuelta 2015. Tiene un perfil similar a Barguil: eterna promesa pero que no acaba de explotar. El Tour podría ser su oportunidad.
En la misma línea, pero un escalafón por debajo, también cabe destacar al argentino que fue segundo en el Tour de San Luis de este año, Eduardo Sepúlveda (Fortuneo - Vital Concept) o al kazajo Alexey Lutsenko (Astana Pro Team) que seguro que estará presente en más de una fuga.
Otros jóvenes dignos de destacar son los velocistas Dylan Groenewegen (LottoNL - Jumbo), que ya lleva seis victorias en lo que llevamos de temporada, o el francés Bryan Coquard (Direct Energie) que fue segundo en los Campos Elíseos en 2015 y lleva la friolera de 13 victorias en 2016. Mucha atención también al dúo de belgas del Trek - Segafredo Jasper Stuyven y Edward Theuns. Debutan en esta edición con toda la ilusión y ambición del mundo.
Al fin y al cabo, todos los jóvenes mencionados tienen la brillante oportunidad de justificar su sitio y de demostrar al mundo, y en el mejor escaparate posible, que la edad es sólo un número y jamás podrá limitar sus sueños. Mucha atención porque la sorpresa de este Tour vendrá de la mano de alguno de ellos sí o sí.