El ciclismo está a punto de volver justo en el momento donde los rebrotes del coronavirus están acechando al mundo, lo que hace que crezcan las dudas sobre la posibilidad de poder reanudar la competición, puesto que hay equipos que tienen miedo de que sus corredores puedan contraer el virus y poner en peligro su salud. De hecho, ya hay autoridades que recelan de que se celebren determinadas carreras, e incluso algunos alcaldes de determinados municipios no quieren que pruebas del calendario pasen por su municipio para no poner en riesgo a la población de la localidad.

La primera carrera que ha sufrido esta crisis es el Sibiu Tour de Rumania, debido a que ha tenido un aumento de los contagios, con 700 personas que han dado positivo en Covid-19 en un solo día, cifra que no se tenía desde el inicio de la pandemia. La primera consecuencia de estos datos en el lugar de celebración de la carrera, es la retirada de la misma del Alpecin - Fenix de Mathieu Van Der Poel. Además, el equipo ruso del Gazprom y el  equipo italiano del Androni han renunciado a la carrera, que está prevista entre los días 23 al 26 de Julio. En principio la prueba se va a realizar, aunque con el abandono de estos equipos, veremos si finalmente  se disputa.

La Milán San Remo, que se celebra el 8 de agosto, también está en problemas, ya que varios municipios no quieren que se dispute la "classicissima". El alcalde de Borghetto Santo Spirito, Giancarlo Canepa, dijo en SavonaNews que celebrar la carrera "no es una buena opción". "Tengo el máximo respeto por el ciclismo y por un monstruo sagrado como la Milán San Remo, pero organizar la carrera en un momento como este, en plena temporada de turismo, con todos los problemas habituales que enfrentan nuestros controles en verano, agravados por los Covid-19, no es una buena opción", argumentó.

Muchas de las autoridades encargadas de la carrera hubieran preferido la celebración de la clásica italiana en el mes de septiembre, ya que tendrían más tiempo para que mejore la situación sanitaria que ha golpeado tan duramente a Italia y al resto del mundo. En estos momentos los cimientos para la celebración de la carrera no están del todo puestos y la carrera está en peligro.  Esperemos que se puedan celebrar todas las programadas en el calendario ciclista y que podamos disfrutar de este deporte tan maravilloso que es el ciclismo.