Vigésimo primera jornada de la Premier, y algo extraña por el horario. Como si de Champions League se tratase, el encuentro en Dean Court daba comienzo un martes a las 20:45.
Primera mitad poco vistosa pero buena para los cherries
Comenzó el partido en el que ambos se jugaban mucho. Los cherries buscaban aumentar su colchón respecto a los puestos de descenso; mientras los hammers querían seguir su buena dinámica (tres victorias seguidas, dos en liga y una en FA Cup).
Sin embargo, los primeros compases no parecían presagiar una buena velada para el West Ham, pues tras diez minutos de partido en los que no se vio demasiado peligro en ninguna de las áreas, Andy Carroll caía lesionado. Los servicios médicos entraron rápidamente para diagnosticar al delantero inglés, que se estuvo probando en banda. Tras un par de minutos, el '9' hammer aceptó que no podía continuar y se retiró al túnel de vestuarios. Otro revés para Carroll, que sufre la tercera lesión de la temporada, y sigue sin poder encontrar la continuidad necesaria.
Por otra parte, no se acabarían ahí las dificultades del West Ham. Dos minutos después de la entrada de Jelavic, en el 17 de juego y tras una incursión por banda derecha, Arter recibía un balón en tres cuartos de campo, y tras un buen recorte se sacó un latigazo desde fuera del área. El balón cogió efecto y botó delate de Adrián, que erró al tratar de rechazar el balón, y este se introdujo dentro de la portería para dar ventaja a los locales.
A partir del minuto 20, el Bournemouth trató de apoderarse del balón para calmar el ritmo del partido. Sin embargo, el West Ham estuvo acertado e imprimió una marcha más a su juego, de forma que comenzó a ganar la posesión y algunos valiosos metros de terreno rival. Pero si algo han demostrado los cherries esta temporada es efectividad, y en la primera contra que encadenaron Stanislas dejó solo a Afobe contra Adrián, pero el debutante no supo definir y erró la clara ocasión. Sin embargo, en los últimos diez minutos de la primera mitad los hammers empezaron a encontrar ocasiones: un centro de Jelavic, que tras un toque en un defensa a punto estuvo de entrar, pero Boruc sacó una mano de la nada para evitarlo. En el córner, casi marca Tomkins y solo dos minutos después, Payet chutaba con la zurda pero Boruc reafirmaba su gran actuación con otra mano salvadora. Pese a este buen tramo de fútbol, los hammers no consiguieron el empate y el Bournemouth se llevaba una ventaja por la mínima al descanso que daría todo por defender.
Tras el descanso, un nuevo West Ham para la remontada
Tras los reglamentarios 15 minutos de descanso, ambos equipos volvían al terreno de juego sin cambios en la alineación. Cambiaron la portería sobre la que atacaban, e involuntariamente cambiaron la suerte de la primera mitad. Escasos cinco minutos tras la reanudación Matt Ritchie, que estaba cuajando buena actuación, necesitó ser sustituido por lesión. Eddie Howe mandaba al campo otro debutante, en este caso al jugador cedido por la Roma, Juan Iturbe.
El West Ham no se había enfriado, y siguió atacando en la segunda mitad. Michail Antonio protagonizó una magnífica jugada individual dejando atrás a tres rivales, pero su tiro se marchó desviado. Los hombres de Slaven Bilic ya estaban controlando el partido, pero no por eso el Bournemouth desapareció del partido. Los cherries salían como felchas buscando las contras, y Arter volvió a avisar a Adrián con una volea que se marchó fuera. Bilic dio entrada a Jenkinson por Tomkins en el minuto 60, seguramente buscando más profundidad en el lateral derecho.
Fruto del dominio del West Ham, Antonio se hizo con un balón y encaraba la meta rival con verticalidad. Smith entendió que el inglés podría crear peligro y realizó una entrada para parar la jugada de ataque, lo que le costó una tarjeta amarilla. Corría el minuto 67 de partido, y Dimitri Payet decidió que era el momento de sacar la varita mágica. Colocó el balón y chutó con efecto por encima de la barrera. El balón simplemente parecía teledirigido a la escuadra, y entró tocando ligeramente el larguero. Boruc voló para detenerlo, pero ni siquiera sacó los brazos pues el gol era sencillamente imparable. Los hammers encontraban un merecido empate, y Payet veía una tarjeta amarilla por su celebración, según el criterio del colegiado.
El gol fue como más combustible para la locomotora del West Ham, que no bajó su intensidad ni un ápice para buscar la remontada. El Bournemouth estaba contra las cuerdas, y los hammers lo sabían. Concretamente, Payet lo sabía. El francés no había guardado su chistera, y siete minutos después (minuto 75) de su golazo se inventó una magnífica jugada dejando atrás a dos rivales, penetrando en el área por línea de fondo y regalando en bandeja de plata el 1-2 a Enner Valencia, que solo tuvo que fusilar desde el área pequeña. Tras esta soberbia demostración de calidad, Bilic retiró a Payet para dar entrada a Song, de corte más defensivo y así asegurar el resultado.
2-1! Valencia with Payet assist!
Vine by West Ham Social
Pero el Bournemouth no se quedaría de brazos cruzados. Eddie Howe metió enseguida a Glenn Murray por el goleador Arter. Pero el cambio ofensivo se quedó lejos de hacer que el Bournemouth marcase un gol. Y más cuando Valencia iniciaba una internada por la banda izquierda y sacaba una falta justo fuera del área, a punto de ser penalti. El ecuatoriano "se la pidió", y con toda la confianza del mundo hizo un extraordinario golpeo que cogió un efecto extraño para despistar a Boruc y se coló por la escuadra que había perforado Payet solo 17 minutos antes.
Los cherries ya parecían resignados. Hicieron una buena primera media hora, pero a partir de la segunda parte el West Ham desató un vendaval de fútbol del que no pudieron refugiarse. Tan solo un balón colgado que Ogbonna despejó mordido y rebotó en el palo, y un lejano disparo de que Adrián mandó a córner con una estirada fueron las llegadas serias en la segunda mitad. Demasiado poco y demasiado tarde.
Genial victoria para el West Ham que aprovecha el pinchazo del Manchester United, que empató 3-3 en casa del Newcastle, para adelantarle y colocarse quinto en la tabla. Por su parte, el Bournemouth sigue 16º con tres puntos de ventaja sobre los magpies, que con el punto sumado cierran las posiciones de descenso.
MVP del partido: Dimitri Payet
Indiscutible el reconocimiento al francés como jugador del partido. Aunque algo desaparecido en la primera mitad (como el resto del equipo), llevó la batuta del juego del West Ham desde su despertar en la primera mitad, y tuvo su consolidación en forma de un magistral gol y una excepcional asistencia.