Se venía especulando a lo largo del verano que un agente libre de gran calidad había suelto en Alemania. Max Meyer, jugador que no acudió al Mundial de Rusia 2018 con la Maanschaft, no había renovado su contrato con el Schalke 04 y los teutones perdían el derecho a exigir una cantidad por su traspaso. 

La siempre atractiva y económicamente floreciente Premier League inglesa, se convertía en uno de los destinos favoritos para el centrocampista de Oberhausen, quien lleva años destacando como promesa pero que, a sus 22 años, necesita dar el salto definitivo al estrellato para no quedarse estancado. 

Y, por fín, se llevó el gato al agua el Crystal Palace de Roy Hodgson, equipo que llevaba siguiéndole todo el periodo estival de fichajes, firmándole por tres años. 

El jugador fue plata en los Juegos Olímpicos con su Selección Nacional. Se trata de un futbolista de los que derrochan calidad en cada posesión que tiene, dominando en medio del campo allá por donde aparece gracias a un dominio del balón extraordinario. 

En el equipo de Gelserkirchen disputó 21 partidos como titular y un total de 24 la pasada campaña, destacando más en labores creativas que estadísticas, convirtiéndose en un jugador elegante, dotado de una gran conducción de balón. 

En total, deja un legado en la Bundesliga de 141 partidos en su haber, 17 goles y 12 asistencias, así como el corazón de los aficionados por el buen fútbol en Alemania. 

Se podría decir que en Selhurst Park disfrutarán de un jugador que gusta ver, con un estilo en el que sus características son de jugador con el esférico pegado al pie, pasador entre líneas, creativo y de rápida salida tras regate. 

Se encontrará con un club en el que se le darán galones, podrá desarrollar su potencial al completo y crear una sociedad de lujo con Wilfried Zaha, debido a que acostumbra a caer a cualquiera de las dos bandas, pudiendo desajustar defensas asociándose y cambiando posiciones con el costamarfileño.  

El jugador, ha realizado sus primeras declaraciones como jugador Eagle, indicando que está "emocionado por empezar a entrenar y comenzar la temporada", a la vez que se mostró optimista indicando que espera "realizar un gran año". 

La ilusión ha llegado al Crystal Palace de la mano de Max Meyer, y el talento germano tendrá en sus manos orientar su carrera y dispararla hacia arriba, o diluirse en la siempre física Premier League, la cual carece de jugadores con la vistosidad y visión de juego del ya ex jugador del equipo minero.