Los derbis son partidos que siempre gusta jugar, pero lo que más suele agradar tanto a seguidores, como a integrantes del equipo es ganarlos. "La oportunidad la pintan calva" y un Inter que lleva una senda más que impoluta contando sus cuatro últimos partidos como victorias recibía a un AC Milan que intentaba asomar la cabeza tras dos partidos sumando los tres puntos.

Los de Spalletti afrontaban el partido sin ninguna baja en sus filas, por lo que el técnico interista podía contar con su plantilla al completo. Luciano Spalletti no especuló debido al compromiso del miércoles en UEFA Champions League y salió con su once titular dibujado en un 4-2-3-1. Este dibujo quedaría formado por Handanovic en portería; Vrsaljko, de Vrij, Skriniar y Asamoah; como doble pivote formarían Vecino y Brozovic; en mediocampo estarían ubicados Politano, Nainggolan y Perisic; en la punta de lanza formaría el pistolero Mauro Icardi.

Por su parte, Gennaro Gattuso tenía alguna baja, pero ya bastante afrontadas como son la de Conti y Strinic por dolencias de larga duración, por lo que el entrenador milanista pudo contar con los mismos efectivos que en pasadas citas ligueras y europeas. Gennaro Gattuso no decidió cambiar el dibujo y formó con un 4-3-3 formado por Donnarumma en portería; Calabria, Musacchio, Romagnoli y Ricardo Rodríguez en defensa; Kessie, Lucas Biglia y Bonaventura en el centro del campo; arriba formarían Suso, Higuaín y Çalhanoglu.

Primera parte de goles anulados

Con un Giusseppe Meazza lleno hasta la bandera y con nutrida presencia de aficionados del AC Milan que inundaban la zona sur del estadio comenzaba el partido con gran dominio interista reflejado en un centro servido desde banda izquierda que Vecino prolongaba para que Icardi, en posición de fuera de juego, batiese a Donnarumma obligando al árbitro a anular la jugada.

Con un partido dominado de cabo a rabo por el Inter, llegaba el momento de tensión para el cuadro local ya que Radja Nainggolan requería de asistencia médica y posteriormente de un cambio por lo que Spalletti daba entrada a Borja Valero.

El Inter seguía a lo suyo y volvió a inquietar el arco rival con un centro de Perisic controló en el área y obligaba a Donnarumma a sacar una gran mano para evitar el gol. Y esta no sería la única para el Inter, ya que otro centro esta vez hacia Icardi era rematado alto por el argentino. Con todo esto, el Milan tuvo ocasiones para inquietar el arco rival con un corner prolongado que remataba Musacchio en fuera de juego claro. Con esto llegábamos a descanso con un partido más que adueñado por parte del Inter, pero sin hacerlo reseñable en el marcador.

Nainggolan en el momento de la lesión / Foto: gettyimages
Nainggolan en el momento de la lesión / Foto: gettyimages

Segundo tiempo de tardía recompensa

El segundo tiempo comenzaba sin ningún cambio ni en los onces ni en la esencia del partido, ya que era el Inter quien seguía llevando las manijas del partido e inquietando la portería rival con un centro chut de Matteo Politano que salía por pocos centímetros de la portería rival.

El Inter quiso dar más importancia a su ataque dando quemando sus dos últimas naves con Keita Baldé y Antonio Candreva. Gennaro Gattuso también movió fichas y dio entrada a Cutrone para ejercer presencia en ataque, a Bakayoko para dar más fortaleza en medio campo y a Abate para quemar un par de minutos al crono. Con los cambios realizados y en tiempo de descuento, la situación iba a cambiar de forma dramática puesto que de un supuesto empate iba a llegar delirio a las gradas del Giusseppe Meazza gracias a un centro telegrafiado de Matias Vecino que Mauro Icardi remataba dentro del área pequeña suponiendo el 1-0 en el minuto 92 de partido.

Con esto llegábamos el final del partido. Un partido en el que el Inter encontró una tardía recompensa en forma de tres puntos que le permiten ser tercero en la Serie A a 6 puntos del líder en detrimento de un AC Milan que se sitúa decimosegundo a dos puntos de la zona de Europa League.

Mauro Icardi besa a su esposa tras el tanto de la victoria / Foto: gettyimages
Mauro Icardi besa a su esposa tras el tanto de la victoria / Foto: gettyimages
VAVEL Logo