Borussia Mönchengladbach 2016/2017: A seguir en la línea de los últimos años

El Borussia Mönchengladbach afronta esta nueva temporada con la meta de volver a clasificarse para la Liga de Campeones, como tercer o cuarto clasificado, como ya hiciera el año pasado con la llegada de André Schubert al banquillo potro que consiguió remediar un inicio de campaña nefasto de la mano de Lucien Favre, que había sido el gran artifice del salto de calidad que ha dado el equipo en los últimos años desde que ascendiera a la Bundesliga en la temporada 2007/08, construyendo un proyecto de equipo, tanto en materia de fichajes, donde ha sido capaz de renovarlo año tras año ante las constantes salidas, como en la impronta futbolística “alemana” adaptada a las circunstancias del equipo, que ha dejado en herencia, y que el ex técnico del filial borusser ha sido capaz de resucitar, a base de actitud, y de cambios tácticos, convirtiendo al equipo de Renania del Norte, en conjunto más agresivo, y que se despliega al contraataque con más jugadores.

Consiguiendo enlazar una gran racha de victorias, y llegando a derrotar al Bayern de Múnich en casa por 3-1, en un encuentro en el que fue superior al conjunto bávaro a base de saber replegarse bien en defensa con el ya emblemático 4-4-1-1, y de ser desequilibrante y letal jugando al contraataque, la gran especialidad de este equipo. Aunque no es el único recurso para atacar, pues poseyendo en la plantilla a jugadores como Granit Xhaka que se ha marchado al Arsenal tras cuajar una buena eurocopa, el cuadro blanquinegro ha sido capaz de dominar el esférico algunos encuentros.

Es cierto que este año, el equipo va a tener muchas más dificultades para dominar los encuentros, ante el cambio de cromos Xhaka/Kramer que ha realizado en el centro del campo, pues el internacional alemán es un centrocampista que también está capacitado para darle una mínima pausa al equipo en el centro del campo, pero precisamente, es un centrocampista más físico y con más llegada al área, en contraste con la calidad, la finura y la visión de juego del albano-suizo. Por todo esto, el control de juego dependerá más de otros jugadores como Dahoud, que seguramente le acompañará en el doble pivote esta temporada.

Aún así, es posible que para el tipo de juego que realiza el Borussia Mönchengladbach, que es bastante ligero, defensivo y conservador al conceder un menor protagonismo a los atacantes, para lo que es el estilo alemán que acostumbra a ser veloz, directo, desequilibrante, y a estar bastante marcado por la calidad técnica, Kramer pueda ser mejor mediocentro, por su mayor poderio físico, su mayor agresividad y su mayor protagonismo en el juego ofensivo, pues es un jugador con buena llegada al área.

Un técnico continuista

El entrenador de este miembro de la nobleza de la Bundesliga, es André Schubert que tiene 45 años, ha nacido en Kassel, y ha entrenado a Paderborn tanto al filial, como al primer equipo, al St.Pauli, y al Borussia Mönchengladbach tanto en categoría inferior, como al primer equipo, gracias al cual se ha dado a conocer en Europa, a causa de una racha de victorias con la que consiguió posicionar al equipo en el tercer y el cuarto puesto, al final de la primera vuelta y en la conclusión de la pasada temporada.

Este joven entrenador alemán apodado “El Harry Potter de Mönchengladbach”, ha abogado desde su llegada a principios de la temporada anterior, por un estilo directo, jugando al contraataque y replegándose con el emblemático 4-4-1-1 en el que Raffael jugó en su día como segundo punta por detrás de Max Kruse, y en el que ahora juega como delantero centro y es acompañado por Lars Stindl. El cual se podría considerar una continuación del promulgado por el suizo Lucien Favre. Afronta la segunda temporada al cargo de este club, con la meta histórica de clasificarse nuevamente para la Liga de Campeones como tercero, evitando la previa que está jugando actualmente ante el Young Boys, y con la aspiración de poder pelear por la DFB Pokal, y llegar lejos en la actual UEFA Champions League.

Fichaje destacado

 El fichaje estrella del club para esta temporada ha sido la vuelta de Cristoph Kramer, un mediocentro de contención, más físico que Xhaka, que sabe mantener bien la posición, a pesar de ser un llegador, es inteligente tácticamente, y bastante aseado con la pelota, tiene pausa y tiene una cierta visión de juego para poder dirigir mínimamente el juego de un equipo. Aunque uno de los aspectos en los que más destaca es el ofensivo, pues un jugador que se descuelga bien de su posición, y que a lo largo de un partido llega al área rival en bastantes ocasiones, aunque a pesar de ello, su aportación goleadora es escasa. Por todo esto, es el hombre llamado a dirigir a su equipo en el centro del campo, tanto con balón, como sin él.

Pilares del equipo

Referente

 Desde que llegara a la plantilla en 2013, Raffael se ha ido haciendo un hueco en la plantilla a base de goles, velocidad, movilidad y trabajo defensivo, en los primeros dias jugando de segundo delantero, por detrás de Max Kruse que era el delantero referente, y quizás un jugador más rígido tácticamente, pero este mediapunta brasileño que a raíz de la marcha de Max Kruse al Wolfsburgo, se ha convertido en un falso delantero centro, con la obligación de ejercer de referencia, pero aún así, el sigue siendo un jugador de gran movilidad, que aparece por todo el frente del ataque, y esa es una de las cosas que más perjudica al equipo, y es que este futbolista, por mucho que juegue de 9, sigue pensando y actuando como un segundo punta en muchos tramos dentro de un partido, lo que deja al Gladbach sin referente, y lo que al mismo tiempo termina coartando al jugador, que no puede explotar esa faceta, pues se ve en la obligación de ser el delantero centro de referencia en el equipo, con todo lo que conlleva, tanto moralemente, como futbolísticamente.

Barrera defensiva

 El gran modelo defensivo de los potros es sin duda Tony Jantschke, un defensor veloz, habilidoso, polivalente, potente en el juego aéreo, y está dotado de una gran calidad técnica, lo que le permite sacar la pelota jugada desde atrás con bastante orden. Es un jugador capaz de jugar de lateral por ambas bandas, y está perfectamente capacitado para jugar de central, por su gran inteligencia táctica, que le permite leer los partidos a la perfección. Quizás, su único defecto es que a veces juega demasiado acelerado, y puede cometer alguna temeridad, a la hora de entrar sin balón sobre un rival.

Esperanza

 Este internacional alemán llamado Mahmoud Dahoud, se ha convertido en la gran esperanza de la afición del Borussia Mönchengladbach, después de que el joven mediocentro deslumbrara con sus actuaciones, y demostrara una conducción muy fina con el balón, una gran visión de juego, habilidad para el último pase, buena llegada al área, capacidad para darle pausa al juego e incluso, un buen disparo de media distancia. Todas estas cualidades, son las que le dan grandes posibilidades de ser titular la próxima temporada, y las que ya han llamado la atención de varios clubs europeos.

Once ideal

Esta es la alineación más previsible para la próxima temporada. En la portería, permanecerá Yann Sommer que realizó una buena campaña 2015/2016, mostrándose como un portero ágil, y con muchos reflejos. El lateral derecho será propiedad de Jantschke que busca aportar equilibrio defensivo, por un costado, que tradicionalmente, siempre ha sido de una gran actividad ofensiva. La pareja de centrales sería danesa, con el recién llegado procedente del Werder Bremen, Vestergaard, y Christensen que firmó una buena campaña. El lateral izquierdo, volverá a ser propiedad de Oscar Wendt, del que se espera que realice la aportacion ofensiva de todos los años, y que vuelva a ser puñal. 

El doble pivote lo conformarán Dahoud y Kramer, que son jugadores muy distintos, y si aunan sus cualidades podrían crear una gran mezcla, con la que nadie echaría de menos a un centrocampista de corte más defensivo como Nordveit. Las bandas serán de André Hahn, que espera poder aportar calidad, desequilibrio y más disparo de media distancia, mientras que la otra pertenecerá a la eterna promesa de este equipo, Patrick Herrmann, que es un jugador tan irregular como talentoso y veloz, que debería de recuperar la titularidad esta temporada.

Por último, la pareja de delanteros, a la espera de Josip Drmic, o de otro nuevo fichaje, estará formada nuevamente por Lars Stindl y Raffael. La formación es un 4-4-1-1 claro, y dos variantes tácticas que se podrían realizar, serían: retrasar a Lars Stindl, y posicionarlo a la altura de los extremos, o a la altura de los mediocentros, y formar un trivote en fases de repliegue, y otra sería la de adelantar a Dahoud, o adelantarle y retrasar también a Stindl, formando un 4-1-4-1, dejando solo a Kramer en el mediocentro.

Estadio

El Borussia Park tiene una capacidad máxima de 59.724 espectadores. Sin embargo, para los partidos de Bundesliga existe un límite de 54.010 espectadores. La capacidad se reduce en casi 6.000 personas debido al cambio en el diseño del fondo Sur (a excepción de la zona creada para los aficionados visitantes del sector 6), que se ha convertido en una grada íntegramente de asientos. El coliseo del Borussia Mönchengladbach tiene una capacidad de 46.279 espectadores (todos sentados) para las competiciones europeas. Para estos partidos, los sectores del fondo Norte más cercanos al campo están equipados con asientos. 

Tribuna inferior: 18.883 asientos, 16.145 localidades de pie (incluidas 2.066 en la zona designada a los aficionados visitantes). La capacidad total de la tribuna inferior es de 35.028.

Tribuna superior: 18.788 asientos, 194 asientos para prensa. La capacidad total de la tribuna superior es de 18.982.

Todas las gradas están completamente cubiertas. El terreno de juego es una superficie de hierba de 105 m x 68 m.