Paqui nació en la provincia de Alicante el 6 de diciembre de 1970. Su posición predominante fue la de defensa, la única demarcación que ocupó durante toda su trayectoria en el fútbol profesional, alternando entre el lateral y el centro de la zaga.

Tras pasar por varios equipos de primer nivel en aquel entonces, recaló en la Unión Deportiva, donde mostró su mayor potencial, convirtiéndose asi en todo un ídolo de la afición canaria y en el cual, tras un breve paso por el Club Atlético Osasuna,  decidió poner punto y final a su carrera como futbolista de élite.

Debut deportivo

El jugador alicantino llegó a la masía y tras pasar varios años en la cuna de la cantera del FC Barcelona, le llegó la oportunidad de debutar en el filial principal del conjunto culé en el año 1990, antes de poner rumbo la temporada siguiente a las Islas Canarias.

Tras destacar mayoritariamente en sus primeros partidos como jugador azulgrana,  el Club Deportivo Tenerife se hizo con un servicios, obteniendo a un zaguero carismático y con carácter de líder. En sus primeras temporadas como jugador blanquiazul se convirtió en un estandarte de lujo, probablemente en la época más dorada de la entidad chicharrera.

Oro olímpico

Tras haber pasado apenas dos años de su debut, le llegó la oportunidad que cualquier jugador desearía tener, ya que fue convocado con la selección española para disputar Los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, junto a jugadores bastante conocidos como Kiko Narváez, Luis Enrique o Pep Guardiola.

El combinado nacional se acabó proclamando campeón del torneo, colgándose en el cuello por primera vez en su historia un oro olímpico.  Parte de culpa de este histórico logro, la tiene Francisco Nicolás, ya que fue una pieza clave en la consecución de este.

Sin embargo, a partir de ahí, el jugador de alicante no volvería a aportar mucho más a la selección ya que su declive estaría a punto de comenzar.

El declive del campeón

En las campañas posteriores a la consecución del oro, éste demostró no encontrarse a su mejor nivel, pues el canterano del FC Barcelona ya no era aquel líder destacado, ni aquel férreo defensa, algo que comenzaría a notar de manera destacada el conjunto blanquiazul.

En 1995 su andadura por Santa Cruz llegó a su fin y fue fichado por el Real Zaragoza, pero desafortunadamente para el conjunto maño, el jugador tampoco encontró su mejor nivel por tierras aragonesas, por lo que decidió hacer las maletas para marcharse a su tierra natal y, de este modo, pasar a formar parte de la plantilla del Hércules CF que acababa de ascender a la élite del fútbol español. El cuadro alicantino buscaba resucitar a aquel líder carismático de sus inicios futbolísticos, pero fracasaron en en el intento.

Finalmente, Paqui volvería a encontrar refugio en el paraíso canario.

El nacimiento de un ídolo

Tras unas temporadas irregulares, la Unión Deportiva su cruzó en su camino con el objetivo de que se uniera al proyecto que devolvería a los amarillos  a la élite del fútbol español. Con su pundonor, perseverancia y trabajo diario se metió al público en el bolsillo, afición que por aquel entonces abarrotaba el mítico Insular.

Hoy en día hablar de Paqui es recordar los últimos años de gloria de Las Palmas, ya que fue uno de los integrantes de aquel equipo que tocó el cielo con las manos. A día de hoy sigue siendo recordado por la hinchada por su amor a los colores, a los que quiso por encima de todo, como él mismo manifestó  antes de un derbi: "El Tenerife me dio mucho, pero mi corazón es amarillo".

El alicantino es de esa clase de jugadores que todo equipo desearía tener, pero que sólo unos pudieron disfrutar. Un defensa férreo y sin fisuras, con carácter y cuyo ímpetu contagia a al resto. Fue, es y seguirá siendo hasta el fin de los tiempos un amarillo más. Seguirá siendo uno de los capitanes históricos de la Unión Deportiva Las Palmas.

Su buen hacer en el mundo del balompié no pasó desapercibido, sobre todo en Pamplona y Alicante. En la ciudad Navarra se creó una peña en su honor, llamada "Peña Paki-Paki Taldea" en la que los los integrantes de la misma suelen llevar una peluca rubia en recuerdo de su característica y extensa cabellera. En cambio en su ciudad natal se fundó la ciudad deportiva "Glorieta Deportista Paqui Veza".