El C.D. Leganés logró el objetivo. Los cincuenta puntos que los blanquiazules se fijaron alcanzar en el inicio de Liga son ya una realidad. Han llegado a cinco jornadas del final, y certifican la permanencia virtual para el conjunto pepinero. Ahora, el objetivo cambia de abajo a arriba, y en el punto de mira están los playoffs. Unos playoffs que terminarán siendo la única vía de ascenso para Las Palmas, después de perder tres puntos vitales en su pelea por el segundo puesto.

Primera parte sin emoción

Los primeros cuarenta y cinco minutos fueron la sombra de lo que aguardaba en el segundo acto. El Leganés intentó llevar la iniciativa del encuentro, ante un conjunto canario que le costaba aguantar la posesión y crear peligro. Tan solo dos tiros desviados de Roque Mesa hicieron aparecer a Las Palmas en ataque. El Leganés se sentía cómodo con la pelota y lograba generar llegadas al área, consiguiendo las dos ocasiones más claras de la primera parte.

El lateral derecho David Simón dejaba pasar un balón hacia su potero, sin darse cuenta de que Chuli estaba al acecho. Rebañó la pelota el delantero pepinero, pero disparó al exterior de la red fruto del poco ángulo que tenía. Se desesperó más de una vez Paco Herrera con Simón por convertir esa banda en un coladero en favor de Aguirre, que aprovechó la autopista más de una vez. Minutos después, nuevamente Chuli propiciaba el peligro. Esta vez el gol era impedido por un paradón a bocajarro de Casto.

Puro fútbol en el segundo acto

Sergio Prendes logró el gol 500 del Leganés en Segunda División

La segunda mitad tuvo gol, y emoción a raudales. A los cinco minutos, un perfecto contraataque pepinero abría el marcador. Aguirre recorrió cincuenta metros con la pelota, se la dejó a Soriano, quien centró de primeras viendo a Chuli en el área. El onubense la dejó pasar, y Prendes, que llegaba al segundo palo, marcó a placer para adelantar al Leganés.

Euforia desmedida en Butarque, que sin embargo duró muy poco. Al minuto, empató Las Palmas. Un balón colgado al área lo remató de chilena un ambicioso Araujo. La pelota iba al palo largo, y Serantes se estiró para atraparla, pero se le escapó. La dejó muerta, y Simón apareció para empujarla y poner el 1-1 en el marcador. Todo como estaba.

El gol canario podía haber supuesto un punto de inflexión en favor de los amarillos. Le dio unos minutos de energía, pues Viera estrelló un balón a la madera tras introducirse magistralmente en el área, pero el Leganés no se achicó, y mantuvo la fe en lograr el segundo gol. Una fe que se personificó en Chuli, pues de nuevo se sacó de la chistera un gol a lo ‘Juan Palomo’. Cuando Aythami parecía haber recuperado el balón tras un control difícil con el pecho de Chuli, el ‘12’ del Leganés volvió a aparecer para robársela, e introducirse en el área superando en velocidad a Mercelo Silva. Sólo le quedaba superar al portero, algo que Chuli sabe hacer muy bien. De nuevo por delante, y 2-1 que supuso el golpe definitivo para Las Palmas.

No consiguieron recuperarse del mazazo los canarios, que a medida que pasaban los minutos caían a merced del Leganés, que supo aguantar ante un equipo que le faltó orden e inspiración en sus jugadas de ataque.

Alegría para uno, decepción para el otro

Treinta y siete jornadas después, llegaron los 50 puntos que suponen la práctica permanencia a falta de cinco jornadas, y permiten a los de Garitano enfrentarse ahora a un nuevo reto: los playoffs de ascenso. Abiertamente ya reconocen los blanquiazules que lo van a intentar. Las Palmas, sin embargo, no pudo sumar para seguir en la pelea por el ascenso directo. Paco Herrera confirmó, con palabras de autocrítica entre las que se escucharon 'decepción' y 'fracaso', que pelarán por una posición mejor, pero sólo en puestos de playoffs.