Era un partido que podía llevar a engaño. El Rayo Vallecano, un equipo acostumbrado a codearse con los equipos de la zona alta y media de la tabla, llegaba necesitado de puntos, pero esa situación no le importó al Athletic que encaró el encuentro de la misma manera.

Con la garra por bandera y a pesar de algunos cambios en el once, el club rojiblanco salió a por la victoria y la consiguió gracias  al solitario tanto de Irene Paredes en los primeros compases del choque. 

Irene marcó su tercer gol de la temporada

Las pupilas de Joseba Agirre sabían que gran parte de las posibilidades pasaban por controlar el balón. Desde el primer minuto mostraron esas ganas, con una presión bastante adelantada y logró su premio en el minuto 3. Ainhoa Moraza robó un balón en tres cuartos de campo, pero su ocasión la desbarató la portera. El peligro había desaparecido, pero parcialmente. Las rojiblancas tenía en un córner a favor y en esa jugada llegó el gol. Iraia botó el córner e Irene Paredes, como ya lo ha demostrado en otras ocasiones, remató a las redes en el segundo palo.

Con ese gol tempranero, las locales pudieron manejar mejor el encuentro y más después de que el Rayo apenas se mostrara en ataque. Una falta botada por Noe en la frontal y que se fue bastante arriba fue la única ocasión en de las vallecanas. La falta de mordiente de las vallecanas lo aprovechó el Athletic para mostrarse en ataque. Lo intentaron de todas las maneras, Maite, Yulema y Ainhoa se mostraron más incisivas, pero no lograron ese tanto de la tranquilidad. 

Ellas insistieron sobre la portería de Ali, pero las ocasiones estuvieron en las botas de Flaviano y de Eli Ibarra. Primero fue la centrocampista quien lo intentó, pero su disparo fuera del área se fue demasiado alto. Luego fue Eli Ibarra quien, de alguna manera, quiso emular a su compañera y su tiro tuvo más intención pero topó con la madera. Ninguna de ellas pudo superar la línea de gol y con el solitario tanto de Irene se llegó al descanso.

Sin cambiar la garra

Con el mismo guión se presentó la segunda mitad. El Rayo Vallecano apenas pasaba del centro del campo, y el Athletic lo aprovechaba para intentar marcar el segundo. Yulema y Maite volvieron a mostrarse incisivas, con jugadas individuales, pero los centros y los disparos siempre terminaban en las manos de la portera.

No obstante, mientras que las vallecanas daban sus últimos coletazos, el Athletic tenía intacta su garra y volvieron a demostrarla a balón parado. Primero fue una falta de Eli Ibarra que cabeceó fuera Irene por poco, y poco después  la guipuzcoana volvió a poner un centro más cerrado al que llegaron Gimbert e Irene Paredes, pero el remate se fue rozando el poste.

El arreón final del Rayo no fue suficiente

Según se acercaba el final, parecía que la garra  que el Rayo quería quemar las últimas naves y se acercó más que nunca a la portería defendida por Ainhoa, pero tampoco con tal peligro que pudiera cambiar el resultado de la contienda.

Al final, los dos equipos dejaron que los minutos pasaran y las ocasiones dejaron de atisbarse en Lezama. De esta manera, la garra del primer gol y la garra que se mantuvo durante los 90 minutos hicieron que los tres puntos se quedaran en casa.Con los 13 puntos en cinco partidos, se mantienen líderes junto al Atlético de Madrid y de la Real Sociedad, a la espera de que el Barcelona juegue en la tarde de este domingo. Así, el próximo fin de semana viajarán a Huelva para enfrentarse al Sporting.