El Molinón ha sido testigo del nacimiento de un nuevo Levante. El conjunto azulgrana ha sacado los tres puntos bajo la lluvia y lejos del Ciutat para demostrar que la buena imagen del equipo en este último mes no era cosa de espejismos. Con buen fútbol y de manera holgada el equipo de Rubi ha borrado todos los problemas achacados al equipo de un plumazo; tres goles, portería a cero y una gran primera parte.

Deyverson en dos ocasiones y Feddal pusieron un 0-3 en el marcador que deja al equipo rozando los puestos de permanencia y que golpea duramente además a un rival directo.

Goles bajo la lluvia

La mañana y el partido comenzaban con una incesante lluvia que no se calmó hasta los minutos en los que el chaparrón azulgrana ya había caído. El equipo de Rubi empezó avisando en un encuentro solo igualado al inicio por parte de Deyverson en el minuto 9 de partido; un disparo del delantero desde la izquierda sería el preludio de lo que pasaría acto después. Una segunda jugada en saque de esquina propició un paradón estéril de Cuellar, quien no pudo desviar el consiguiente cabezazo del brasileño tras un disparo mordido de Lerma.

Tras el gol el dominio levantinista fue absoluto. Los de Rubi se adueñaron del balón, la posesión y las ocasiones ante un Sporting que no sabía cómo reaccionar. Hasta ese momento, una única internada de Hugo Fraile había llevado el susto a la portería de un Rubén que no se dejaría superar en ningún momento del partido. La presión incansable del Levante y la llegada constante de los centrocampistas ocasionaban demasiados problemas a los locales que vieron como un robo de Camarasa y posterior falta al borde del área en el contragolpe supondrían el 0-2 en el marcador y un jarro de agua fría; el lanzamiento perfecto de Morales revivió como un deja-vu un paradón de nuevo estéril de Cuellar, que rechazó como pudo y dejó a Feddal solo para empujarla.

Con Halilovic llegó el susto

Poco después de poner distancias en el marcador, la perla croata del Barcelona -ahora cedido en el Sporting- Alen Halilovic se inventó la jugada más clara de la primera parte. El joven delantero recibió para el uno contra uno dentro del área y envió el balón rozando la escuadra del palo largo de Rubén tras un lanzamiento de su propio sello con la pierna izquierda; en ese momento pudo cambiar el partido. Sin embargo, el destino quería que fuese el Levante quien aprovechara todas las oportunidades del encuentro y tras un saque de esquina y rechace de nuevo de Feddal, Deyverson pusiera en el marcador la ventaja definitiva.

El brasileño anotaba de nuevo y ponía el 0-3 definitivo para romper la sequía de gol que arrastraba tras la llegada de Rubi al banquillo. Con ese resultado y con la sensación de partido finiquitado el partido llegaba al descanso.

Rubén alejó al Sporting de la épica

Con la reanudación el Sporting decidió salir a por la heroica que suponía puntuar tras el 0-3. El equipo asturiano ya sabía lo que era remontar una diferencia amplia en el marcador tras hacerlo contra el Granada en la jornada 8. Sin embargo el cancerbero Rubén no estaba por la labor y decidió convertirse en el verdugo de los hombres de Abelardo, enfriando a una afición que en caliente tira de su equipo a situaciones de este calado. La relajación del Levante por lo abultado el resultado permitió que el recién entrado Carlos Castro tuviera el gol a tiro de testarazo. El central Zizou lo impidió empujando al delantero y cometiendo la pena máxima; sería Jonny quien tomara la responsabilidad de intentar acercar a los rojiblancos en el marcador y Rubén Martínez quien abortara aquella situación incómoda que se disponía a entrar a escena si el extremo -que todavía no ha transformado ningún penalti con el primer equipo hubiese estado acertado.

Esta nueva situación enmudecía El Molinón y acababa con toda situación favorable para los locales de intentar rascar algo positivo. Después de aquello las últimas jugadas de verdadero peligro llegarían con un rechace en propia puerta que sacó bien de reflejos Rubén y un disparo en el descuento de Halilovic de gran similitud al realizado en la primera parte y que de nuevo volvió a perderse cerca de la escuadra de Rubén.

Por su parte, el Levante intentó aprovechar los espacios que dejaba el Sporting con la velocidad de Morales y Deyverson pero no supieron concretar las ocasiones dejando finalmente el marcador ya establecido al término de los primeros 45 minutos.

De esta manera, Rubi consigue la primera victoria del equipo fuera de casa esta temporada y ante un rival directo con goles y buen fútbol, terminando además con muchas de las situaciones negativas que habían hundido al equipo en la tabla como un primer paso que debe ser el sol al que seguir para la permanencia.