El Lleida supera con sufrimiento al Atlético Saguntino

El Lleida Esportiu ha cosechado su segunda victoria (2-1) de la temporada, nuevamente sobre el césped del Camp d'Esports. Los pupilos de Gustavo Siviero han tenido que sufrir para superar a un Atlético Saguntino que ha sabido aprovechar la expulsión de Turu Flores para ganar terreno y cerrar a los azules en su propia área. Sin embargo, los goles de Christian Alfonso y Cristian Gómez han sido suficiente para sumar los tres puntos.

El partido comenzaba de manera inmejorable para el Lleida Esportiu, pues transformaba en gol su primera oportunidad. Apenas habían transcurrido cinco minutos de juego cuando Christian Alfonso recibía un pase dentro del área y, tras recortar con habilidad a su defensor, definía con la izquierda al fondo de la red ante la salida del portero visitante, Juna. Lo más difícil ya estaba hecho, o eso parecía. Y es que el conjunto de David Gutiérrez no se derrumbó. Fue a por el empate y casi lo consigue con un cabezazo de Carlos Esteve que a punto estuvo de sorprender a Álvaro Campos. La réplica local, una buena jugada personal de Fran Moreno que Miki Muñoz culminó con un disparo desde la frontal que se marchó fuera.

El Lleida se queda con diez

El cuadro valenciano reclamaba penalti en un rechace de la defensa leridana, pero el árbitro no lo señalaba. En cambio, sí expulsaría al central argentino Turu Flores por doble amonestación tras derribar a un adversario que se dirigía a los dominios de Campos. Faltaban todavía ocho minutos para terminar la primera mitad y el Lleida se quedaba con un jugador menos. Entonces, los visitantes tomaron las riendas del choque y quedaba claro que a los de Siviero les tocaría sufrir si querían conservar los tres puntos. Por si fuera poco, el técnico de Laguna Paiva sustituía a Fran Moreno (con molestias físicas durante la semana), uno de los jugadores del Lleida con más capacidad para retener la pelota. En el saque de la falta que había conducido al Turu a la grada, Álvaro Campos se lucía con una gran estirada para rechazar el lanzamiento de Ferreres. Y también intervenía minutos más tarde para blocar un cabezazo de Óscar López en un saque de esquina.

Como era previsible, al Lleida Esportiu le tocaría sufrir a la vuelta de los vestuarios. El Atlético Saguntino daba un paso adelante y asediaba el área azul con constantes centros que la defensa acertaba a rechazar. Y cuando no era la defensa (por ejemplo Toño Vázquez enviando a córner un pase de la muerte de los de Sagunt), era el portero Campos quien alejaba el peligro. Los ilerdenses también lo intentaban de vez en cuando, como en un disparo lejano de Quintillà que detenía Juna con ciertas dificultades. El encuentro se trababa en medio de protestas, faltas y tarjetas para ambos equipos. Un contexto en que el Saguntino potenciaba sus virtudes. Así pues, nuevamente obligaba a Álvaro Campos a intervenir, esta vez en un remate de cabeza de Trilles.

Sufriendo hasta el final

Xavi Quintillà, que parecía tener más oxígeno que nadie, daba aire a sus compañeros con una gran jugada personal que terminaba con un penalti a favor. El lateral leridano cruzaba el campo y llegaba hasta el área, donde Óscar López le derribaba. Cristian Gómez transformaba la pena máxima por el centro de la portería y establecía un tranquilizante 2-0. Pero aún no estaba todo el pescado vendido.

Pese al resultado, el Atlético Saguntino continuó poniendo cerco a la portería del Lleida. Siviero hacía debutar al central Andriu para reforzar la defensa. Sin embargo, en el primer balón que tocaba a punto estaba el canario de sorprender a su propio portero con un despeje que por poco no se convertía en autogol. Además, el colegiado, muy protestado por el público del Camp d'Esports, le señalaba un penalti que David Fas no desaprovecharía para recortar distancias a poco de la conclusión. Tocaba volver a sufrir, cruzar los dedos y contener la respiración en un final de infarto que se prolongaría durante cuatro largos minutos de descuento. Y en uno de los múltiples centros sobre la portería del Lleida Esportiu, tuvieron el empate los visitantes. Su remate, sin embargo, se marchó fuera lamiendo el travesaño. Los tres puntos se los quedaba un Lleida que había culminado la semana perfecta.