Se me ha subido el isquio y me he retirado por precaución”, estas fueron las palabras de Fran Sandaza al término del encuentro frente al Rayo. El ariete toledano se tuvo que retirar del terreno de juego en el minuto 89 debido a unas molestias en el isquiotibial que le impidieron continuar a un ritmo alto de partido. Debido a que el entrenador ya había realizado las tres sustituciones para intentar voltear el marcador, el Girona disputó los minutos finales con un hombre menos sobre el terreno de juego, “con un 1-3 en el marcador y a escasos minutos del final he preferido no arriesgar y retirarme del campo antes de poder agravar la lesión”.

El delantero que ya estuvo diez días de baja esta temporada por unos problemas en el abductor frente al Cádiz en la primera vuelta, estará pendiente de evolución en los próximos entrenamientos para saber si podrá contar para Machín para el próximo encuentro donde el Girona visitará Soria, un campo donde Pablo Machín se sentirá como en casa.

La enfermería crece en Montilivi

Fran Sandaza es uno de los hombres fijos en el ataque de Machín, esta temporada ya lleva siete goles anotados y es un habitual en el once junto a Longo en el ataque, aunque Machín últimamente está optando por alinear a un solo delantero centro, lo cual puede perjudicar a Fran Sandaza debido a su edad (32) y a las características de delantero que busca Machín, ya que le gusta más optar por la juventud y la garra de Longo que por la experiencia de Sandaza. Esta jornada Fran Sandaza disputó todo el partido debido, seguramente, a las molestias que tuvo Longo, que saltó a calentar para probarse, pero a los pocos minutos tuvo que volver al banquillo. ​A estas dos posibles bajas para el partido de Soria del próximo fin de semana, hay que sumarles las bajas de Richy, todavía lesionado y de Ramalho, que lleva tres semanas sin poder estar disponible para Machín.

La situación del equipo

Dejando a un lado la lesión de Sandaza, en zona mixta también se le preguntó por la situación del Girona después de estas tres derrotas consecutivas del conjunto catalán.

Estamos en una dinámica mala, toca levantarse. Estamos segundos porqué lo merecemos. Quedan diez finales y tenemos que estar juntos, unidos, sin echarle mierda a nadie”, esto último lo dijo debido a la actitud del público de Montilivi, el cual pitó en un tramo de partido y murmuró después del tercer gol que encajó su equipo. "La temporada es muy larga y tenemos que estar más unidos que nunca”, el toledano insistió mucho en la unión del vestuario, debido a su experiencia es una pieza clave en el vestuario y es uno de los futbolistas que más trabajo psicológico puede hacer desde dentro, un trabajo muy importante para los más jóvenes que pueden pagar esta presión de la grada después de esta mala racha.

Todos los jugadores que pasaron por zona mixta coincidían con Sandaza: “la derrota ha afectado mucho al vestuario”, pero los futbolistas siguen convencidos de que el ascenso es posible y lucharán hasta el final para conseguirlo y darle una alegría a su público. Quedan diez partidos, como apuntaba Sandaza, y tienen un colchón de seis puntos respecto al tercero (Tenerife) al cual visitarán en dos semanas, al Girona le tocará sufrir durante diez jornadas esperando que ese sufrimiento no sea en vano y que en verano estén conociendo a su primer rival en Primera División.