No ha sido una temporada fácil para el Atlético de Madrid en ningún sentido. El conjunto de Simeone ha tenido que hacer frente a lesiones de jugadores importantes, a altibajos en el juego que se veían reflejados en el resultado y, sobre todo, a una primera vuelta que dejó mucho que desear en la Ribera del Manzanares. De hecho, el Atlético dijo adiós a La Liga ya en Navidades y, con Barça y Real Madrid fuera de su alcance, el Atlético tuvo que centrarse en lograr su principal objetivo: la tercera plaza.

El Sevilla de Sampaoli había, incluso, saboreado el liderato y apuntaba alto en unos primeros meses en los que parecía que iba a echar un pulso a los dos gigantes de la competición. Llegó a tener al Atleti a nueve puntos de diferencia, pero, con el paso de los partidos y las semanas, el conjunto hispalense se fue desinflando. Por la otra parte, el Atlético experimentó un cambio de imagen digno de elogio. El 2017 sentó mejor que bien a una plantilla que no estaba dispuesta a echar la temporada por la borda ni a jugarse la presencia en Champions en una fase previa.

Desde el mes de enero, los colchoneros firmaron una racha de ocho victorias, tres empates y una derrota (contra el Barcelona), llegando al vital partido contra el Sevilla en el Calderón tras haber goleado al Valencia (3-0) y ganado al Granada (0-1).

La consagración de la remontada por el tercer puesto

La jornada 28 llegó con el gran atractivo de un Atlético - Sevilla que sería trascendental para las aspiraciones de ambos conjuntos. Los andaluces podrían sentenciar prácticamente la tercera plaza o los rojiblancos recortar tres puntos a su rival, dejándole muy tocado moralmente tras dos empates que supieron a derrota. Finalmente, aquel partido acabó siendo el mejor de la temporada 2016/2017 para el Atlético de Madrid en la competición liguera.

Los rojiblancos ofrecieron a su fiel afición la mejor imagen del año. El verdadero Atleti había vuelto y un Sevilla a la deriva lo pagó. Godín (1-0, minuto 37) abrió la lata a balón parado para encarrilar un partido que controlaron los del Cholo en todo momento, Griezmann (2-0, minuto 61) dejó una de las perlas de la temporada con un auténtico golazo de falta directa que se coló por la escuadra de Diego Rico y Koke (3-0, minuto 77) sentenció cazando un balón en el área pequeña y rematando a placer con la portería vacía. El Sevilla, ausente y perdido sobre el césped, solo pudo maquillar el resultado gracias al joven Correa, el mejor de los suyos, poniendo el definitivo 3-1 en el marcador.

De este modo, el Atlético ganó la primera `final´ de la temporada, resurgiendo a costa de un Sevilla hundido, al que, además, le ganó el golaverageEste partido supuso un punto de inflexión para la temporada de los rojiblancos, fue una demostración de fortaleza y de poderío ante un equipo que se consideraba "el nuevo Atleti". Después de esta victoria llegaron otras muchas y, sobre todo, llegó la tercera plaza. El Atleti dejó una tarde para el recuerdo en un Vicente Calderón que ya es historia. Una de tantas.