El fútbol es caprichoso. Nunca sabes cuando puede darte una oportunidad del todo inesperada. Que se lo pregunten a Mariano Barbosa. El portero nacido en Lanús (Argentina) regresó al Villarreal en verano de 2015, después de una primera etapa en la que llegó a disputar unas semifinales de Champions League con el club castellonense. Su incorporación y la de Areola sirvieron para hacer olvidar a Asenjo hasta que se recuperó a mediados de febrero de 2016. Durante las temporadas 2015-2016 y 2016-2017, el ex guardameta de Sevilla y Las Palmas disputó un total de 14 encuentros (tan solo dos la pasada campaña con Fran Escribá) repartidos mayoritariamente entre Copa del Rey, fase de grupos de Europa League y un par de duelos de la recta final liguera

Sin embargo, las cosas han cambiado mucho para Barbosa. La nueva temporada deparaba al cancerbero amarillo un puesto suplente de Andrés Fernández, por lo menos hasta la recuperación de Sergio, pero la lesión del portero murciano en Anoeta le ha abierto las puertas de la titularidad de par en par. El argentino se ha convertido en el guardián de la portería amarilla, y además mostrando un nivel notable, a excepción de la debacle de todo el equipo en el choque ante el Getafe. Mariano ha disputado un total de 8 encuentros en la presente campaña, 6 de Liga y 2 de fase de grupos de la Europa League, con unos excelentes números de 5 porterías a cero y 6 goles encajados, de los cuales 4 pertenecen al partido del Coliseum Alfonso Pérez. 

El meta amarillo debutó en el encuentro de Anoeta, disputando la segunda mitad del choque, con un marcador ya de 3-0 en contra. Pese a la mala imagen del equipo y a la lesión de Andrés en el tercer gol local, el nivel de Barbosa fue la mejor noticia para el Villarreal aquella tarde. En la jornada siguiente, el argentino encajó un tanto del Betis, obra de Sergio León, pero el conjunto castellonense pudo remontar el 0-1 y conseguir la primera victoria de la temporada. Cuatro días después, en la jornada inaugural de la Europa League, Mariano encajó un gol en el choque ante el Astana (3-1), tras un error defensivo de los amarillos en una jugada de córner. 

En la jornada 4 de Liga, Barbosa fue prácticamente un espectador más en el imponente 0-3 que reflejó el electrónico al término de los 90 minutos. Pocos días después, el meta se exhibió en varias oportunidades clave del Espanyol, cosechando una buena serie de paradas para el recuerdo. Su actuación permitió al Villarreal conservar el empate (0-0). Ya en el último encuentro de Fran Escribá en el banquillo amarillo, no pudo hacer nada en ninguno de los 4 goles que recibió su equipo, tras una horrible actuación defensiva y de marcaje. La llegada de Javier Calleja al banquillo del Villarreal ha devuelto, por el momento, el cerrojo a la portería. Ante el Maccabi en Europa, Barbosa realizó pocas intervenciones, pero cumplió cuando tuvo que hacerlas. Mientras, ante el Eibar en el Estadio de La Cerámica (3-0), el ex portero hispalense apenas tuvo incidencia en el juego, con la excepción de los buenos balones en largo, fruto de los saques de meta, que sirvió a los centrocampistas amarillos.