A Míchel le están funcionando sus tácticas en Vallecas, y no es sólo cuestión de suerte, en gran parte es por su buena visión del fútbol. Ha sabido combinar a jugadores jóvenes, con grandes cualidades, con jugadores veteranos que aportan la madurez necesaria a un equipo como el Rayo Vallecano, que apunta a ascender a la máxima categoría.

La inclusión de talentosos futbolistas como el caso de Fran Beltrán o Santi Comesaña, en detrimento del experimentado capitán Trashorras, marcan unas pautas muy claras que quiere mantener el técnico rayista.

Además, también ha querido mantener en su once de gala a Dorado, quien en ocasiones ha provocado que su equipo sumara los tres puntos -como el partido en Vallecas ante el Granada en el que los suyos ganaron por la mínima-.

Mientras tanto, Amaya, un peso pesado del vestuario y gran ídolo la afición, está en busca continua de minutos cuando el cedido por el Atlético de Madrid, Velázquez, o el experimentado central citado anteriormente, no están disponibles.

El once tipo escogido por Míchel, aparentemente tampoco deja sitio para grandes promesas como el caso de Akieme o Joni Montiel. Grandes atletas de banda que potencian en demasía a cualquier equipo. Pero que con jugadores clave para el preparador, como Álex Moreno y Embarba respectivamente, no juegan los minutos que merecerían para explotar sus cualidades.

Tampoco hay que olvidar la actual capitanía de Alberto. Un guardameta con gran experiencia en la categoría y dotes para ganarse y dirigir al vestuario. En cambio, el joven Mario apenas dispone de oportunidades -tan sólo jugó en Copa del Rey- y actualmente se encuentra en el dique seco por una lesión de la cual tratará de reponerse en este parón. Mientras tanto, Lucho García -portero del filial-, ocupa su puesto en el banquillo.

Por lo que el secreto de Míchel para haber llegado a Navidades con el Rayo Vallecano en cuarta posición es complicado de adivinar. Pero quizás la combinación entre veteranos y jóvenes ayude a sus planteamientos de cara a conseguir triunfar en una categoría en la que pequeñas diferencias, pueden suponen el deseado ascenso.