Ayer se disputó la jornada 21 de la Liga Santander, donde se enfrentaron el Villarreal CF y la Real Sociedad en el Estadio de La Cerámica. El conjunto amarillo traía a sus espaldas la comodidad de tres victorias consecutivas y la confianza de conseguir otra, por su parte la Real Sociedad llegó en un momento de crisis por la que arrastraba tres derrotas seguidas y la necesidad de sumar puntos.

Eusebio sorprendió con un once novedoso. Toño Ramírez debutó en Primera División, dejando a Rulli en el banquillo por primera vez en Liga por decisión del míster. La otra novedad fue ver una nueva alineación nunca vista antes en el campo. Eusebio dispuso una táctica con tres centrales en la que Januzaj ocupó la banda izquierda.

Los donostiarras tuvieron la oportunidad del primer ataque peligroso pero la respuesta del submarino amarillo fue contundente. En un saque de esquina directo al segundo palo, Victor Ruíz le ganó en carrera a Navas y cabeceó el primer gol en el minuto cinco. Minutos después llegó el segundo error defensivo de la Real, quien no estuvo atento y le dejó a Fornals en bandeja el 2-0. Por si fuera poco, Bacca ponía en 3-0 en un contragolpe en menos de 20 minutos. Parecía que el partido estaba sentenciado para los vascos pero el excelente centro de Illarramendi y el remate de Llorente rompían números en el marcador consiguiendo el 4-1. No todo estaba perdido; el partido se volvió interesante. 

Víctor Ruiz celebra su gol | Foto: LaLiga Santander
Víctor Ruiz celebra su gol | Foto: LaLiga Santander

A raíz del gol de Llorente, el partido se animó. El mensaje había cambiado. La Real ataca: siente orgullo y se siente herida. Vimos a un Odriozola explosivo por el extremo derecho, como siempre. Decir que en la primera parte el equipo de Eusebio no había despertado, sus jugadores estaban decaídos y perdidos. No podemos decir lo mismo de Odriozola e Iñigo Martínez, ambos estuvieron sublimes en todo el partido. En una ocasión de ataque en la que el de Ondárroa subió con el balón a los pies, vimos como le pedía por señas a su compañero Januzaj que se acercase a portería, que espabilase. El belga se sentía tímido. 

Odriozola avanza con el balón a los pies | Foto: LaLiga Santander
Odriozola avanza con el balón a los pies | Foto: LaLiga Santander

La ilusión se rompió en pedazos con el 4-1 en manos de Castillejo. Januzaj no supo como actuar, un grave error defensivo que les salió bastante caro. Los cambios de Eusebio no veían mejora. 

La segunda parte del encuentro empezaba con una Real que quería meterse en el partido. El conjunto txuriurdin dominó la segunda parte pero no con la confianza y los ánimos suficientemente altos como para hacer gol. Comenzaron presionando pero no fue lo suficientemente fuerte ni enérgica para mantener el balón dentro del área enemiga. Odriozola puso en apuros en más de una ocasión a su contrincante; son dignos de admirar los partidos del joven promesa. Un paradón de Ramírez le salvó, posiblemente, de las críticas. Oyarzabal no estuvo fino en este partido. No era el Oyarzabal peligroso y efectivo que conocemos. 

Igor Zubeldia pugna por el balón | Foto: LaLiga Santander
Igor Zubeldia pugna por el balón | Foto: LaLiga Santander

El gol de Willian José redujo distancias frente al 4-2 que nos sacaban de ventaja los de Calleja. Faltó tiempo y ánimos para el tercero. El cuadro vasco pagó los tres goles en los primeros 20 minutos y no había tiempo para remontar, ni tan siquiera contando con los cuatro minutos de descuento. Final del partido. Los cambios de Eusebio no cambiaron nada. La Real sigue siendo goleada; sigue perdiendo.