Existen varios grandes jugadores que han pasado a la historia del Rayo Vallecano, desde Cota a Míchel, pasando por Wilfred Agbonavare, cuyo fallecimiento cumplió el pasado 27 de enero tres años. Uno de esos jugadores que será recordado por la afición rayista es Antonio Amaya. El central cumplió el pasado viernes la increíble cifra de 250 partidos con la elástica franjirroja. Tal es la cifra que por delante de Amaya solo se encuentran Cota, Míchel, Felines, Alcázar, Uceda, Bordons y Anero. Piti, actualmente en el AEL Limassol, se encuentra un escalón por detrás.

Antonio Amaya es también uno de los tres jugadores de la historia rayista que han fichado hasta en tres ocasiones por el conjunto madrileño. Formado en las categorías inferiores del club, el defensa probó suerte en Inglaterra en las filas del Wigan Athletic, pero su aventura apenas duró una temporada (2009-2010). Llegó de nuevo cedido a Vallecas para conducir al Rayo a Primera División y se marcharía esta vez al Betis. Desde el verano de 2014 no ha vuelto a salir de Madrid. El mencionado Piti y Armenteros -que ha llegado este invierno procedente de la liga mexicana- comparten la misma característica.

A sus 34 años, Amaya ha jugado con la camiseta rayista en Primera División (36 partidos), Segunda (91), Segunda B (99), Copa del Rey (17) y Promoción de ascenso a Segunda, con siete encuentros. Con un valor de mercado actual de 300.000 euros, según Transfermarkt, alcanzó su valor más alto en 2013, con dos millones. Con seis goles y dos asistencias, ha visto 43 tarjetas amarillas, acabando cuatro de ellas en una expulsión (solo ha visto una tarjeta roja en su carrera, en las filas del Betis).

Lo cierto es que Amaya, que debutó en la élite en el CD San Cristobal de los Ángeles, ha perdido su papel de titular esta temporada. Ha disputado la mitad de los partidos ligueros -trece-, disputando un total de 759 minutos, lo que hace una media de casi una hora jugada por cada uno de esos encuentros (sin contar el de Copa ante el Tenerife que disputó entero). Además, el único gol de Amaya esta temporada fue el primero de la temporada, en la primera jornada ante el Oviedo.