Confianza, todo reside en la confianza. Para un jugador de fútbol una de las cosas más importantes al entrar en un equipo es sentir que tiene la confianza de los compañeros, del presidente y de la afición. Sin embargo, la confianza que más valora un jugador es la del entrenador y Zinedine Zidane le demuestra en cada partido a Lucas Vázquez y a Marco Asensio que son parte importante de este Real Madrid y, como no podía ser de otra manera, ambos internacionales, han respondido y de qué manera.

Marco, que tiene un carisma inconfundible para ganarse al Bernabéu, comenzó la temporada como un tiro, con dos auténticos partidazos en la Supercopa de España frente al Barça y un comienzo de liga auténticamente extraordinario. No obstante, pocos jugadores pueden mantener ese ritmo durante toda la temporada y Asensio entró en un pequeño bache del que, felizmente, ha conseguido salir. En el notable partido que cuajó ayer se pudo ver a un Asensio con esa zancada que le caracteriza, con confianza para encarar, asociándose con sus compañeros y haciendo daño por esa banda izquierda que tanto le gusta.

Y si a Asensio le gusta vivir en la banda izquierda, el hábitat de Lucas Vázquez por antonomasia es la banda derecha, donde se desenvuelve como los ángeles. El extremo gallego ha sufrido esta temporada el mismo caso que el mallorquín, un bajón notable de juego en los meses centrales de competición de los que, como no podía ser de otra manera, también ha salido. Es, a estas alturas, sin ninguna duda, el jugador número 12 para Zidane y su plan ‘B’ en los partidos que no salen adelante con los 11 titulares.

En definitiva, ambos jugadores están cuajando un final de temporada muy bueno, tan bueno, que son claros candidatos para la lista de 23 jugadores de Julen Lopetegui para el Mundial de Rusia.